Alejandra Bolaños, modelo

"Me gusta estar durita"

Para conservar una figura escultural, está joven alza pesas

Los ojos verdes de Alejandra Bolaños brillan tanto como su carrera en el campo del modelaje, donde su nombre cada día se escucha con más fuerza, en especial, desde que desfila en las pasarelas de ropa íntima.

Esta rubia, de 23 años, dedica tiempo a esculpir su figura y para ello se vale de las visitas al gimnasio donde alza pesas. Además, como toda modelo, rechaza las comidas rápidas.

Para Alejandra -bronceada de pies a cabeza-, perder peso es sencillo, pues así es su metabolismo, dice con simpleza.

Ella sabe que no puede darse el lujo de aumentar sus medidas, pues el mundo de la moda costarricense está lleno de bellas y proporcionadas jóvenes.

Al menos tres o cuatro días a la semana hace ejercicios en el gimnasio Tuma Sport, en Tibás, preferiblemente por las tardes, pues suele haber menos gente.

Allí pasa unas dos horas, pero le dedica más tiempo al levantamiento de pesas.

Esta josefina empezó su carrera hace 5 años cuando la invitaron a hacer un "casting" para la Cervecería Costa Rica.

Fue así como se convirtió en una "vaquerita Pilsen", en el 2000, mientras estudiaba ingeniería civil, en la Universidad Hispanoamericana.

Su trabajo le ha permito recorrer todo el país e incluso cruzar nuestras fronteras y pasear por toda Centroamérica.

Ella no es madrugadora, se da tiempo para el descanso. Eso sí, cuando hay que levantarse temprano es muy disciplinada y cumplida.

Precisamente, en estos días, Alejandra ha tenido que sacrificar el sueño para cumplir varios contratos, entre ellos ser una de las vaqueritas Pilsen en el tope de Palmares que se efectuó este jueves.