Manuel Delgado, Periodista
Filósofo y enamorado Ronny Rojas
Fuera de cámaras, el periodista Manuel Delgado no es tan serio como dicen.
Eso sí, cuida cada palabra que pronuncia y se le nota en los cuatro costados su amor por la cultura.
Hace dos semanas, este herediano, de 53 años, fue galardonado con el premio Joaquín García Monge a la divulgación cultural, por su programa "Blanco y negro", que se transmite por Telenoticias.
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"De vez en cuando saco tiempito para ponerme las botas, agarro una pala y me voy a trabajar la tierra"
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Divorciado y padre de dos hijas, Delgado reconoce que es un hombre enamoradizo. "Pero no mujeriego, que no es lo mismo", dice.
Es filósofo y periodista, graduado en la Universidad de Costa Rica; fue bailarín frecuente en el salón los Higuerones y asegura que le apasiona la agricultura.
¿Cuántas veces se ha enamorado?
No sé (risas)... Es una de mis debilidades. Creo que una vez por día.
¿Tiene novia?
Pues sí... (risas) Hay una muchacha con la que me veo de vez en cuando, como una vez por semana porque ella vive en Atenas. Es una buena mujer y es 10 años menor que yo.
¿Es difícil para la gente convivir con usted?
Creo que sí, los filósofos somos las personas más incómodas del mundo, no dejamos a las personas vivir tranquilas.
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Foto Rafael P.
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¿Se ha emborrachado?
Muchas veces, pero no fui alcohólico... Lo peor de tomar es perder la capacidad de autodirigirse.
¿Cuál es su peor vicio?
El cigarrillo, no lo he podido dejar... Qué sé yo, por cosas de la vida o tonterías de uno. Pero voy a dejarlo, sobre todo, porque molesta a los demás.
¿El mejor día de su vida?
Cuando nació Gabriela, mi hija mayor.
¿Es un papá bravo?
No, siempre he sido complaciente con mis hijas. Además, soy un suegro comprensivo, les tengo mucho cariño a los novios que han tenido.
¿Le gusta bailar?
Me encanta, sobre todo el bolero. No me gustan las discotecas, pero cuando puedo me voy a bailar a algún salón.
¿Un sueño sin realizar?
Cantar en un escenario. Aunque fuera uno pequeño, en algún colegio, me habría encantado subir a uno.
¿Le cree a los políticos?
La primera virtud del ser humano es ser desconfiado, y yo, en general, no les creo. Aunque me gusta pensar que podrían decir la verdad en algún momento.
¿Le molesta que imiten su voz en la radio?
Para nada (risas). Froylán Bolaños es amigo mío y lo hace con mucha gracia y respeto. Además, creo que es una buena imitación la que hace.
¿Hay suficiente espacio en Costa Rica para el periodismo cultural?
La cultura es la cenicienta de la comunicación. Los que trabajamos en esto somos los periodistas menos importantes de los medios.
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