La pura verdad
La factura Edgar Fonseca
Director
¿Tiene precio la cabeza del ministro Garnier de Educación?
¿Están por pasarle su factura desde la propia fracción de Gobierno por su ataque a la corruptela que domina nombramientos de docentes?
¿Se estaría a las puertas de chantajear al Ejecutivo desde esa fracción con la monolítica mayoría de los 38 votos para el TLC, si Garnier no sale a lo Sadam?
En instantes cruciales para la vida del país, se necesitan decisiones trascendentales y una de ellas es atacar con denuedo todo aquello que mine la confianza pública en su basamento institucional.
El presidente Arias lo ha prometido como un norte crítico de su gestión. En ello es fiel a lo que demandó de su gobierno el Sumo Pontífice en la tristemente célebre presentación de credenciales de nuestro “hombre en Roma”.
Con el cáncer de las designaciones en el MEP, lo que corresponde, como lo viene haciendo certeramente el Ministro, es extirpar de raíz el tumor.
Ante las presiones y amenazas que se ciernen, ojalá prevalezca sensatez y firmeza, brinque quien brinque.
Silencio de mastines- Callan las fuerzas sindicales y sociales ticas ante la amenaza de Hugo Chávez de cerrar una planta de Alunasa y despedir a 400 cabezas de familia en Esparza.
No hay bloqueos, ni pachucos y vándalos cierran las rotondas, ni conspicuos intelectuales se rasgan sus vestiduras.
Silencio cómplice este de todos ellos.
La purga- En la Managua del Daniel, de la Rosario y de sus 40 ladrones, reina el pánico entre los empleados públicos que no son sandinistas. Ya van por mil los despedidos, incluso ministras, por órdenes de la nueva “zarina” nica.
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