Cynthia RODRIGUEZ, corresponsal
Rodolfo MARTIN
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Quepos, Puntarenas.- El transportista Mauricio Campos Morera, de 28 años, murió asesinado antenoche de tres balazos después de que, al parecer, fue bajado de su camión a punta de pistolas, golpes y amenazas.

Se presume que el hecho ocurrió durante un ficticio operativo policial ejecutado por cinco falsos agentes del OIJ, confirmó Juan Telmer Badilla, de la Fuerza Pública local.

La víctima, quien deja una viuda y tres huérfanos, apareció a un lado de la Costanera sur, con disparos en la parte superior derecha de la espalda, en la cabeza y en el brazo derecho.

Campos, nacido en Golfito, pero vecino de Naranjo de Laurel de Corredores, vestía una camiseta azul y un pantalón corto de mezclilla del mismo color.

El hallazgo ocurrió ayer a las 4:40 a.m., a la altura del pueblo de Marítima, situado a 14 kilómetros al suroeste de Quepos. Sin embargo, el transportista habría sido emboscado por los falsos policías antenoche en finca Bartolo, siete kilómetros antes.

“Un vecino llamó a la delegación a las 8 p.m. para preguntarnos si nosotros, en conjunto con el OIJ, teníamos algún operativo ahí”, recordó Badilla.

El testigo afirmó ver cuando cinco hombres armados y con camisetas, iguales a las que usan los agentes judiciales, bajaban a un chofer a la fuerza de su camión para pasarlo a uno de los dos vehículos en los que viajaban.

Uno era una Nativa blanca con una luz giratoria en el techo y el otro un Pathfinder.

Los sujetos abrieron la puerta trasera del camión y algo habrían sacado, según testigos.

A Campos, no obstante, no le robaron nada porque, al momento del hallazgo, portaba, entre otras pertenencias 14 billetes de ¢10.000, 25 de $20 y varias tarjetas de crédito, según fuentes cercanas a la investigación.

Testigos que prefirieron no identificarse cuestionaron el por qué la “Policía” abandonó la zona a toda velocidad. Atrás quedó el camión abandonado. Algunos calcularon que los choferes salieron a unos 140 kilómetros por hora, con rumbo hacia Osa. Se dio la voz de alerta y la Fuerza Pública inició el rastreo de los falsos oficiales y el conductor del camión.

La Policía instaló varios retenes de carreteras. Los desconocidos, aparentemente, estuvieron extraviados por algún rato porque tiempo después aparecieron a toda velocidad por Ojochal donde evadieron un bloqueo sin poder ser detenidos.

Campos había salido el jueves de Corredores, supuestamente vacío, porque iba a cargar cerámica a Caldera, según la Policía.

Colaboró Alfonso Quesada.