Alexander Aguilar
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Miles de jugadores han pasado por el fútbol de todos los tiempos, pero son pocos los que quedaron grabados en la retina mundial por aquellas jugadas y acciones que marcaron época.

Y todavía hoy son imborrables en la mente de los aficionados.

Con planeación o improvisación marcaron época y todavía hoy son recordados por el balompié más espectacular de siempre.

¿Recuerdan ustedes el “Escorpión” del portero colombiano René Higuita, en el mítico estadio inglés de Wembley? ¿O el penal globeadito al centro del checo Antonin Panenka en la final de la Europa de 1976 ante Alemania?

Son solo dos jugadas que quedaron para la inmortalidad del fútbol, como también las chilenas del mexicano Hugo Sánchez en el Real Madrid y del brasileño Rivaldo en el FC Barcelona.

No menos inmortales las bellas acciones de los argentinos Diego Maradona en México 86 -- contra Inglaterra burlándose hasta el árbitro antes de anotar-- y del catalán Lionel Messi en la Copa del Rey de España frente al Getafe, cuando desde el mediocampo dribló a todos sus oponentes para marcar un gol de antología.

Otros se sacaron de la manga --al mejor estilo de los grandes magos-- jugadas que no terminaban en gol, pero que igual se ganaban la admiración de todos.

Es el caso del francés Zinedine Zidane, quien pisaba el balón con una pierna, daba media vuelta y lo cogía con la otra pierna.

Todas acciones con el sello de “derechos reservados” e inmortales por los siglos de los siglos. Muchos pretendieron y pretenden imitarlas, pero no pueden hacerlo con la misma chispa y elegancia. El “copyright” manda.

Para siempre

Penal “cuchareado” En la final de la Euro de 1976 el checo Antonin Panenka le anotó un penal histórico, al portero alemán Sepp Maier. Se lo hizo globeadito y al centro.

Mago Zizou El francés Zinedine Zidane patentizó su mejor jugada, que hacía en la “Juve”, en el Real Madrid y en la selección. Pisaba el balón con una pierna, daba media vuelta y lo cogía con la otra pierna.

De colección De los que vieron fútbol en los ochentas, quién no recuerda las chilenas únicas del mexicano Hugo Sánchez en el Real Madrid. Sin duda fueron golazos bellos como pocos en la historia.

Siguió sus pasos El delantero brasileño Rivaldo, actualmente en el Bunyodkor de Uzbekistán, también se lucía con hermosas chilenas, que ponían a brincar a toda la afición del FC Barcelona.

La “Mano de Dios” En México 86 Diego Maradona hizo de todo. Anotó un gol en el que se llevó a toda Inglaterra y en el mismo juego se inmortalizó con la “Mano de Dios”, con la que superó al portero Peter Shilton. Un gol que levantó roncha.

Una joya El argentino Lionel Messi, del FC Barcelona, se quitó de encima a Raymundo y todo el mundo, antes de anotarle al Getafe en las semifinales de la Copa del Rey, de la temporada 2006-2007. Una anotación como pocas en el mundo.

Johan Cruyff y su penal inmortal

Johan Cruyff dejó huella con un penal impensado. Archivo

El gran jugador holandés Johan Cruyff, cuando estaba en los últimos partidos de su enorme carrera, decidió dejar otra huella imborrable con la camiseta del Ajax de Amsterdam.

Corría el año de 1982, Johan Cruyff jugaba para el Ajax de Holanda en un partido que estaba definido por un abultado marcador. Fue entonces cuando un penal a favor del equipo mencionado cambió la historia de los tiros desde los once metros.

Tras posicionar el balón en el manchón, Cruyff fue y le comentó algo a su compañero danés Jesper Olsen.

Unos instantes después Cruyff ejecutaba la jugada más increíble y genial que alguien alguna vez pudo haber imaginado desde el manchón blanco. Tocó la pelota levemente a la izquierda mientras el portero se tendía a la derecha, entonces llegó Olsen para rematar y anotar ante el marco descubierto. Una acción original e impensada para todos.