Deportes
Jueves 19 de enero de 2012, Costa Rica
Pasión por el deporte

Exministro de Deportes, aseguró a Al Día que no le ha robado a nadie, pero cometió un error

William Todd: “Me equivoqué”

José Pablo Alfaro

jose.alfaro@aldia.co.cr

¿Admite que se equivocó?

El error de todo esto fue haber hecho el anuncio y no haber convocado a la prensa para comunicarles que teníamos una propuesta de bien social y por supuesto haberme demorado en comunicárselo a la señora presidenta.

¿Se arrepiente?

Si usted me dice que si me arrepiento de la propuesta yo le digo que en ningún momento, porque nos dan un obsequio del pueblo de China al pueblo de Costa Rica y si usted empieza a ver que hay personas que nunca van a tener acceso, entonces usted dice que es justo que las personas de bajos recursos puedan participar en una forma esquemática para que por lo menos vean un partido de fútbol. Me parece que no es una mala idea, claro yo respeto a todas las personas que digan que esa idea no va.

¿Pero la planificación a la hora de entregar las entradas, parece que no fue formal?

Las entradas nos llegaron a nosotros el jueves 5 a las 4:30 p.m., nosotros tuvimos solo un día para ver que hacíamos con esas entradas, poco faltó para hacerlo el mismo día, la verdad fue muy complicado.

¿Entonces, sí hubo falta de planificación?

Lo que pasa es que nos llegan hasta el día antes. A mi hubiera gustado que las entradas llegaran con una semana de tiempo, pero un día es muy difícil.

¿Por qué la decisión de hacer esto en un acto de tanta sensibilidad?

Nunca pensamos que le tocara a la Organización de Lucha contra el Cáncer, fue de casualidad que estaba esta actividad. Hubiese sido delicado si el estadio no se llena y hubiese sobrado una cantidad de espacios y no hubiéramos podido desarrollar la propuesta. Yo reconozco dos fallas, falta de comunicación con los medios y con la presidenta, me equivoqué en la puesta en práctica, errar es de humanos, mucha gente me ha dicho que de buena voluntad está lleno el cementerio, si me dijeran que esas entradas hubieran debilitado la causa, jamás lo hubieramos hecho.

¿Debe el gobierno pagar el dinero de las 2.130 entradas a la Asociación?

Esas entradas no se vendieron ni se le dieron a gente pudiente. Está claro que no ha habido mala intención, no se benefició a nadie, más bien la Asociación sobrepasó la meta establecida, aquí no ha habido dolo.