Debido a que Luis Mena Rojas, artesano de 35 años, había emigrado de Pérez Zeledón hace años, su familia no se enteró de que era el fallecido en un atropello por parte de un carro de la Presidencia.
El accidente ocurrió la noche del martes a las 6:30 p.m. cuando Mena intentó cruzar la vía, de sur a norte, en el sector de Los Geranios, en San Sebastián, San José.
El Nissan era conducido por un hombre de apellido Martínez, quien escoltaba el carro del vicepresidente Luis Liberman.
Liberman iba a Escazú
La madre y hermanos del fallecido no sabían que se trataba de Mena, quien desde hace 18 años dejó su natal Pérez Zeledón para vivir en San José.
Era gemelo y según Erick Mena, uno de sus hermanos, anoche vieron por televisión el atropello, pero jamás pensaron que se trataba de su hermano.
“Envío mis sentimientos de solidaridad a la familia de la persona que falleció” dijo Liberman, quien esa noche iba para su casa en Escazú.
Las primeras versiones sobre la causa hacen pensar que se trató de una imprudencia del peatón. A escasos 250 metros estaba el puente peatonal.
El Nissan lo golpeó con el costado delantero izquierdo y el cuerpo fue a dar a ocho metros. No quedó huella de frenado en la vía, que estaba seca e iluminada.
La alcoholemia practicada al chofer resultó negativa. Consultado, César Quirós, director de la Policía de Tránsito, aclaró que quienes escoltan a autoridades de gobierno no gozan de ningún privilegio y deben regirse por los límites de velocidad establecidos.
“Solo vehículos policiales en situaciones de emergencia o las ambulancias y bomberos en situación especial”. Los límites de velocidad en las vías y rigen por igual para todos, acotó.
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