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En recuperación
Los operarios Jonathan Cabezas Rosales y Elías Retana Acuña, se salvaron de milagro. Ambos son vecinos de Batán.
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Granada causó explosión
Rodolfo MARTIN / Al Día
El estallido de una espoleta de una granada y no el exceso de presión en la tubería, fue la causa de la explosión que el lunes pasado en Batán, Limón, estuvo a punto matar a dos operarios del Instituto de Acueductos y Alcantarillados (AyA), según un informe elaborado por la Unidad Especial de Intervención (UEI), a solicitud de la Dirección de Inteligencia y Seguridad Nacional (DIS).
El artefacto que detonó es una espoleta de granada soviética UZRGM, la cual se utiliza en algunas de las granadas de fabricación rusa a saber, las granadas RGD-5, F-1 y RG-42, de acuerdo con el informe.
El informe de la UEI, adscrita a Seguridad Pública, recomienda advertir a las autoridades de esa zona que podrían haber más espoletas de este tipo circulando sin control.
La espoleta explotó al ser golpeada por la pala que utilizaba uno de los dos operarios de AyA, mientras rellenaban una zanja que habían abierto minutos antes para reparar una tubería de agua potable que estaba dañada.
Los trabajadores que resultaron heridos son Jonathan Cabezas Rosales y Elías Retana Acuña.
Ambos permanecen incapacitados y recibiendo atención médica.
Retana, mientras tanto, también asiste a rehabilitación. Ambos acusan problemas serios de audición, trascendió ayer.
Al parecer, el fuerte estallido les ocasionó problemas de sordera y equilibrio.
Inicialmente, el ministerio de Seguridad Pública había informado que la explosión obedeció a un aparente exceso de presión en las tuberías.
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