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Muy enfermo
Desde la tarde del martes anterior, Antonio González Alvarez clamaba ayuda porque decía “morirse” y vomitaba constantemente. Anteayer murió en el parqueo del hospital San Rafael de Alajuela.
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Fiscalía busca responsables
Nicolás AGUILAR R. y y Griselda SANABRIA C., corresponsal / Al Día
Alajuela. El Ministerio Público investigará en forma exhaustiva, y sentaría las responsabilidades, el caso de Antonio González Alvarez, de 44 años, quien murió anteayer en el parqueo del hospital San Rafael de Alajuela.
Vecinos y familiares aseguraron a las autoridades que el hombre, soltero y con problemas de alcoholismo, estaba muy enfermo pero no recibió adecuada atención médica.
González, quien vomitaba constantemente y pedía ayuda desesperadamente porque decía “morirse”, según testigos, fue trasladado por una ambulancia de la Cruz Roja a las 10:40 a.m. del miércoles al nosocomio local.
Casi seis horas después no había recibido tratamiento médico ni hospitalizado. Tras vomitar nuevamente, murió a las 5.p.m, tirado en el parqueo de dicho hospital, según informes confirmados ayer por la Delegación del OIJ de Alajuela.
El caso generó malestar entre varios visitantes y pacientes quienes dijeron, incluso ante la Fiscalía, haber visto a un guarda sacar por la fuerza a González poco antes de su deceso.
Ayer, familiares de la víctima estaban conmocionados por la noticia y anunciaron que llevarán el caso hasta las últimas consecuencias.
Incluso, no descartaron demandar penalmente a los encargados del hospital o bien a la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS).
González, quien trabajaba en una pizzería y vivía con su hermana Rossy en Canoas, de Alajuela, llevaba unos ocho días ingirieron licor y desde el lunes anterior sufría severos trastornos digestivos.
“Ese pobre hombre se estaba muriendo, ya vomitaba verde. Llamamos a la Cruz Roja, pero respondían que si estaba sucio no lo trasladarían al hospital”, se quejó ayer Jessenia Rodríguez, vecina del lugar.
Según dijo, tras mucha insistencia, y muchas horas de angustiosa espera, los socorristas aceptaron llevarlo al hospital la mañana del miércoles. Ese mismo día falleció en circunstancias aún no esclarecidas.
Demandan justicia
Rossy González, hermana del fallecido, criticó ayer la actuación de los médicos del hospital alajuelense y advirtió, con llanto en los ojos, que “le daremos seguimiento el caso hasta que se haga justicia”.
Recordó a Antonio como una persona tranquila, bondadosa y trabajadora. Aunque tenía problemas de alcoholismo “nunca molestó a nadie ni se robó nada”, afirmó.
“Ya ve, es como dice todo el mundo, ya no hay sensibilidad humana. Mi hermano no merecía morir así...”, insistió.
González se mantuvo sin tomar licor durante cinco meses pero hace una semana recayó y desde entonces ingería diariamente.
En fuentes judiciales confirmaron que el caso es investigado “a fondo” por la Fiscalía y la policía judicial para determinar si procede o no una eventual acusación penal contra supuestos responsables.
El director del hospital, Francisco Pérez Gutiérrez, anunció que inició una investigación para esclarecer lo sucedido y advirtió que “sentará responsabilidades si es que las hay”.
“Estoy tratando que se me dé toda información sobre el paciente. ¿Si estuvo allí, si salió, por qué y cómo; qué atención se le dio, en fin quiero saber qué pasó en el lapso qué transcurrió desde que la Cruz Roja lo trajo hasta que fue hallado sin vida en el parqueo?”, añadió el funcionario.
Aunque rehusó referirse a versiones relacionadas con un guarda que supuestamente sacó a empeñones al ahora fallecido, Pérez recordó que “ningún administrativo ni mucho menos un guarda puede decirle a un paciente que debe irse”.
Las causas de muerte de González son aún desconocidas. El resultado de la autopsia se conocerá dentro de 15 días.
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