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David Blaine, el popular mago estadounidense, subió el jueves al “Ojo de Londres”, donde vivirá durante 44 días.
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Loco
con estilo
El mago David Blaine pasará 44 días encerrado a 150 metros de altura
Ovidio MUÑOZ / Al Día
La locura más reciente del mago estadounidense David Blaine será en Londres.
El 5 de setiembre, este ilusionista de 30 años se encerrará en una caja pequeña (2,10 metros por 90 cms) durante seis semanas.
Eso sería poco si el cajón estuviera en el suelo, pero estará colgando en el “Ojo de Londres”, la rueda de la fortuna más alta del mundo, cerca del río Támesis, en el centro de la capital inglesa y a 150 metros de la superficie. Por eso Blaine llamó al acto “Encima de abajo”.
Las condiciones en que permanecerá son complicadas: sin comida, ni comunicación, “ni sexo, ni libros, ni música, ni ningún otro estímulo”, añade él.
Solo tendrá cerca un poco de ropa, una cobija, agua por medio de un tubo, y algunos lapiceros y papel para escribir un diario que quizá se publique en el futuro.
Para cumplir con sus necesidades fisiológicas solo contará con pañales y un tubo para orinar.
Pero ése es su trabajo, gracias al cual ganó (solo el año pasado) más de ¢240 millones. Lo ha logrado con una buena mezcla de sorpresas, publicidad y relaciones con algunas cadenas de televisión.
De hecho, ya llegó a un acuerdo con Sky One y Channel 4, de Londres, que televisarán la entrada y la salida de Blaine a la caja.
Retos de verdad
Las hazañas más recientes de este maestro del escapismo, a quien muchos comparan con Harry Houdini, han acaparado la atención de los medios y de la gente.
Estuvo de pie durante 35 horas seguidas en un poste de 30 metros, en Manhattan. Ahí tampoco tuvo agua, ni alimento, ni nada dónde sentarse o apoyarse.
Luego se hizo encerrar en un bloque de hielo de seis toneladas durante tres días.
En este truco no le fue muy bien, pues su plan era estar dentro del bloque congelado por tres días, pero debieron sacarlo cuando tenía dos y medio.
Según contó al salir, vivió momentos terribles. “Era una pesadilla. Cuando el hielo se cerró alrededor de mí, me aterroricé. Después de 24 horas, imaginaba que era un prisionero de guerra, eso me ayudó un poquito, pero entonces tuve alucinaciones”.
Después dijo que pensó que su carrera terminaría y que no volvería a caminar. Tenía los pies hinchados, no podía mover las piernas de la rodilla hacia abajo y tuvieron que ayudarlo para ir al baño. Pero nada le pasó.
Fe en sí mismo
Blaine siempre ha confiado en que sus habilidades lo mantendrán lejos del peligro. “Todos somos mucho más capaces de lo que creemos. Somos más fuertes e ingeniosos de lo que sabemos. Las únicas restricciones contra nuestra capacidad para sorprender son impuestas por nuestras propias mentes”, dice.
Esta es la primera vez que Blaine intentará una de sus hazañas fuera de Estados Unidos, y sabe que no será sencillo. “Estaré en aislamiento público, tendré que soportar adaptándome y sobreviviendo, como hacen los animales por instinto”.
El jueves, para ofrecer un adelanto de emociones, Blaine dio una vuelta completa sobre la enorme rueda en menos de una hora.
Aprovechó para hacer ejercicios de equilibrio sobre una pierna encima de una de las burbujas de cristal donde iban 25 personas.
Pero el plato fuerte del espectáculo será el mismo 5 de setiembre. Ese día, el mago será suspendido en una vitrina transparente sobre las aguas del Támesis para empezar su aventura de seis semanas.
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En 1999, Blaine se hizo enterrar en una urna. Al cabo de una semana salió sano y salvo.
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Este es...
David Blaine nació en Brooklyn, Nueva York, el 4 de abril de 1973.
Su nombre real es David White, Blaine es su segundo nombre.
Animado por su madre, Patrie White, se convirtió en un maestro de la magia.
Cuando tenía 4 años vio a un mago actuando en el metro neoyorquino y decidió conseguir su primer truco en una tienda: compró el del lápiz que atraviesa una carta.
Durante la adolescencia, se interesó en la actuación, y apareció en algunos comerciales y series televisivas.
Tras la muerte de su madre, en 1994, empezó a actuar en fiestas para ricos.
Ha hecho presentaciones para gente como Al Pacino, Jack Nicholson, Arnold Schwarzenegger, Mike Tyson y Madonna, e hizo gran amistad con Robert De Niro y Leonardo DiCaprio.
El 5 de abril de 1999 se sepultó vivo durante una semana, algo que ningún otro mago ha intentado.
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