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Este Mitsubishi Montero 1992 y el Toyota Hilux 1998 fueron decomisados hace varias semanas a vecinos de Aguas Zarcas. Aparentemente, fueron robados en Panamá.
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Investigan tráfico de carros
Álvaro SÁNCHEZ CÓRDOBA / Al Día
Ciudad Quesada.- El OIJ de Ciudad Quesada investiga un tráfico de vehículos de lujo que podría presentarse entre Panamá y San Carlos, según confirmaron fuentes policiales de San José.
El OIJ localizó vehículos aparentemente robados en Panamá y los cuales eran usados por vecinos de Aguas Zarcas.
El director regional del OIJ en Ciudad Quesada, Óscar Murillo, comentó el marcado incremento en el robo de vehículos y resaltó, con especial preocupación, que hay varios talleres identificados, que se dedican a alterar vehículos, en La Fortuna.
Agregó que la investigación de ese supuesto tráfico fue trasladada a San José, pues es un caso internacional.
Según una fuente policial, esos decomisos y la existencia de talleres –que se prestan para esos delitos– ponen en evidencia que podría existir relación entre bandas organizadas de ambos países, cuyo objetivo es el robo de carros de alto valor, los cuales se venden fuera del país.
San Carlos podría ser un destino importante de vehículos robados, o bien, una zona de paso a otros países del área, reconocieron fuentes policiales.
Muy caros
Hace dos semanas fue localizado en un retén policial un Mitsubishi Montero 1992, el que fue robado en Panamá en 1997 a un hombre de apellidos García Soto.
La fuente policial aseguró que el vehículo ingresó a nuestro país tras el correspondiente pago de impuestos y fue inscrito a nombre de una mujer de apellido Huertas.
Ese vehículo será devuelto a su dueño, en Panamá, en unos días confirmó Murillo.
La policía judicial también indaga la procedencia de un Toyota Hilux modelo 1998, el que se le decomisó a un hombre de apellido Porras, vecino de Aguas Zarcas.
La policía judicial no descarta que haya más vehículos en esas condiciones en la zona, por lo que se inició una investigación con la Fiscalía de robo de vehículos.
Cadena de venta
La policía considera que las personas a las que se les decomisaron los vehículos no actuaron de mala fe, ya que en el caso del Mitsubishi Montero, éste tuvo tres dueños luego de que se ingresó al país.
El primer propietario fue un abogado de apellido Marín, quien lo vendió a un empresario y éste lo revendió a otra persona de apellido Román, a quien se lo decomisaron.
En el caso del Hilux, la incautación del carro se efectuó ante la sospecha de era “gemeleado”, pues en Panamá existía otro, con las mismas características, pero era propiedad de un hombre de apellido Morales.
Ese carro aún no va a ser devuelto, dijo Óscar Murillo, del OIJ, pues presenta serios problemas de alteración.
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