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Encuentro... en tierra
Pablo GUERÉN / Al Día
Golfito. Después de tantos días de sufrimiento, de incertidumbre, la de ayer fue una mañana muy diferente para Juan Francisco Poveda. Apenas ingresó al Hospital de Golfito respiró hondo. Estaba más tranquilo. Y en eso una sorpresa, una alegría enorme…
Su amigo, su compañero de cuarto en el accidentado “Fu Fa Chen”, Wílliam Guadamuz, otro de los sobrevivientes de la tragedia, llegó a visitarlo, a alentarlo, a darle como nunca una bienvenida.
En pocos segundos resumieron todo lo vivido, todo el dolor, toda la lucha por vivir. Hablaron de tortugas (principal alimento a la deriva), de la lucha diaria por obtener agua, de la esperanza de ser rescatados, incluso, por un ya arreglado “Fu Fa Chen” y, por supuesto, de compañeros que ya no están.
“Me siento feliz porque ya antes de salir en el viaje dormíamos juntos en la embarcación. Íbamos a comer y a cenar y caminar por el centro de Puntarenas. Me alegra mucho verlo, ojalá hubiéramos sido todos. Dios sabe cómo hace las cosas y nos tocó vivir a nosotros cuatro no más”, expresó Guadamuz, quien trató siempre de alentar a su compañero.
“Me quedé en Golfito hasta hoy (ayer) para conocer la ciudad y poder venir a verte. Claro que la vuelta desde el Puerto (Puntarenas) para venir hasta acá fue bastante larga… Ayer (sábado) vacilaba porque le decía a mi familia que pensé que nunca más vería a la sele ganar”, le comentó a Poveda. Este sonrió. Por fin.
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