Martes 4 de noviembre, 2003. San José, Costa Rica.


Su gesto de emoción es evidente, Raphael recibió una lluvia de aplausos ayer en el Melico Salazar y llevó al público por un viaje en el tiempo gracias a su amplio repertorio.

Sigue siendo aquel

Raphael, “El monstruo de la canción”, se “comió” anoche al Melico Salazar

Isaac LOBO / Al Día

“Desmejorado” ni un pelo, sólo el título de su nueva canción, porque Raphael sigue ganándose el cariño de la gente, después de librar un pulso con la muerte.

Anoche, el teatro Melico Salazar fue todo gala, para darle paso al “Monstruo de la canción”, quien interpretó temas clásicos y nuevos y demostró por qué su más reciente disco se llama “De vuelta”.

En un escenario casi repleto, el español desgranó toda su carrera, con gestos, muecas y actuaciones como sólo él los sabe hacer. Quedó de nuevo demostrado que además de cantar, es un maestro de la actuación.

Contrario a muchos conciertos de otros artistas, Raphael fue ovacionado al iniciarse su actuación (en punto a las 8 p.m.), sin entonar ni una sola nota. Este gesto de la gente emocionó profundamente al español, quien luce como en su mejores tiempos, con una voz de trueno y una energía primaveral.

Emotivo
Raphael es único: en estos momentos adelanta una extensa gira de conciertos en América y hoy será la última presentación de su gira en Costa Rica.

Precisamente, el tema “Desmejorado” (compuesto por el rockero Enrique Bunbury) fue uno de los más dramáticos de toda la noche.

Esta canción es una sorprendente conexión que descubre al Raphael más intimo y nostálgico.

La gente lo aplaudió a más no poder, pues cuenta la nueva posición del cantante frente a la realidad, luego de que casi pierde la vida por una dolencia hepática y por la que tuvo que someterse a un trasplante de hígado el 3 de abril de este año.

Temas como “Mi gran noche”, “Renaceré” (muy a tono con su carrera), “Es vivir” y “Somos”, al finalizar se convirtieron en lluvia de aplausos, gracias a la voz de un cantante que vistió elegantemente de negro.

Un tema que levantó a las personas de sus asientos fue “Yo sigo siendo aquel” que con gestos y mover de brazos, Raphael supo domar a un público enamorado de él.

Hoy es la última oportunidad para que la gente sienta el talento de este español, pues realizará otro concierto en el Melico Salazar, a las 8 p.m.

Las entradas tienen un valor desde ¢10.000 hasta ¢28.000. Están a la venta en el sitio.

El “Monstruo de la canción” dejó una gran lección antes de irse a descansar: que a pesar de todo lo que pueda suceder tras bastidores, el espectáculo debe continuar.

| PORTADA | NACIONALES | SUCESOS | OPINIÓN | SOCIEDAD | OVACION | EL NORTE |
| INTERNACIONALES | SERVICIOS | USTED OPINA | PURA VIDA | ESCRIBANOS |

© 2003. Periódico Al Día. El contenido de aldia.co.cr no puede ser reproducido, transmitido ni distribuido total o parcialmente sin la autorización previa y por escrito del Periódico Al Día. Si usted necesita mayor información o brindar recomendaciones, escriba a webmaster@aldia.co.cr

EDICIONES ANTERIORES