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Los diputados del Bloque Patriótico, Emilia Rodríguez y Humberto Arce, arremetieron contra el presidente del PAC, Ottón Solís. “El PAC vive una crisis severa que puede ser el principio del fin”, dijo Rodríguez. Erick Córdoba / Al Día
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El PAC es blanco de ataques
Pablo GUERÉN C. y Mónica UMAÑA D / Al Día
Aunque se había mantenido al margen de los escándalos surgidos con donaciones a la campaña política no reportadas al TSE, el Partido Acción Ciudadana (PAC) es el centro de críticas en estos momentos.
La gota que rebalsó el vaso fue la denuncia del diputado liberacionista Luis Gerardo Villanueva, sobre una donación de ¢10 millones hecha al PAC en la campaña por la empresa General Business Machines (GBM), reportada tardíamente al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
El presidente del PAC, Ottón Solís, se defendió, y en carta leída ayer por el propio Villanueva, admitió que la donación fue reportada con 15 meses de tardanza al TSE. Empero, desmintió haber tratado de esconder el aporte. Con el dinero se compraron camisetas para el día de las elecciones.
Solís añadió que “toda la gente que estaba en el club” supo de la donación. Ahí estalló la chispa.
El diputado del Bloque Patriótico, Humberto Arce, que en ese entonces fungía como secretario general del PAC, lo desmintió, furioso, el miércoles en el plenario y ayer en la comisión que investiga el financiamiento electoral.
“Creo que es más peligroso para el país comprobar, como en pocos días pasará, que Solís urdió toda una trama para ocultar esa donación. Eso la gente del PAC no lo cree todavía, pero lo creerá. Yo me encargaré de probarlo. Si él no dice la verdad de lo que ocurrió, lucharé en el seno de la comisión de gasto electoral para que haya acciones ejemplarizantes en su contra”, aseveró Arce ayer a Al Día.
Mientras, Solís lamentó los ataques en su contra, y descartó que esto sea motivo de una crisis en las filas de la agrupación.
“Humberto se fue del partido hace tiempo (febrero) y desde entonces ataca mucho al partido y me ataca a mí. El partido está unido, fuerte, muy seguro de sí...” dijo el excandidato desde Washington, donde participó ayer de una conferencia organizada por la American Bar Association, equivalente al Colegio de Abogados en nuestro país.
Sin embargo, la extesorera del PAC, Emilia Molina, desmintió las afirmaciones de Solís y dijo que ella nunca cometió un error al emitir un recibo a nombre de Jorge Rodríguez, representante de la firma GBM.
“El recibo se confecciona a nombre de don Jorge Rodríguez porque él es quien entrega el dinero. Yo desmiento la afirmación (de Solís) de que hay un error”, señaló ayer Molina.
La extesorera se separó de la agrupación política por diferencias con miembros del partido, según explicó vía telefónica. “Como no tenía respaldo me fui. No tengo ningún tipo de ligamen con el partido”, afirmó.
¿Crisis terminal?
Para al diputada del Bloque Patriótico, Emilia Rodríguez “el PAC vive una crisis severa que puede ser el principio del fin. Se tergiversaron conceptos básicos como ética y transparencia y se convirtieron en propaganda, en simple pose con fines electorales”.
“Solís es un muy mal líder. No supo conducir una fracción y se rodeó de gente que le decía que sí a todo sin estar abierto a oir críticas y eso fue la catástrofe”, añadió.
Distinto opina Marta Zamora, jefa de fracción del PAC, quien asegura que “solo quieren atacarnos porque tenemos ideas que proponer para el 2006. Creo que el partido a vencer en el 2006 es el PAC y eso no les gusta a muchos. El PUSC ha sufrido un enorme desgaste, el PLN sabe que aquí se juega la vida y que el PAC va sólido, fuerte, unido”.
Para el analista político, Carlos Sojo, el problema de fondo es revelar cuál es la intención de quienes contribuyen a las campañas electorales, y qué grado de compromiso adquieren los partidos en esa transacción.
“Evidentemente las denuncias del diputado Humberto Arce están motivadas en un enfrentamiento fuerte emocional con el PAC”, aseveró Sojo.
Mientras, el diputado del PUSC, Rolando Laclé, señaló que lo que pasa “es que el PAC es un movimiento muy personalista y con solo una bandera de la honradez, de la actitud impoluta, de los dueños de la moral, y cuando esa bandera empieza a afectarse se afecta toda al estructura”.
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