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De cuidado
Sammy Sosa (Cachorros) es un peligro latente para los Marlins. Hoy será el tercer partido, en Miami.
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Marlins heridos
Miami / AFP. Luego de la debacle sufrida el miércoles en el Wrigley Field de Chicago, los Marlins de la Florida buscarán ahora levantar la moral a partir de hoy, cuando jueguen el tercer encuentro de la serie por el banderín de la Liga Nacional del béisbol.
Los “peces” arrancaron el martes con un apretado triunfo en 11 innings de 9x8, gracias a un jonrón del puertorriqueño Mike Lowell de emergente, pero al día siguiente parecía otro equipo el que estaba en el terreno, al sufrir una aplastante derrota 12x3.
No obstante, la serie se encuentra igualada a un triunfo por bando, por lo que todavía no hay ndada escrito. El estadio Pro Players de Miami no es un paraíso para los jonrones como los es el Wrigley Field.
El conjunto de la Florida tratará de aguantar la artillería contraria, compuesta por los toleteros dominicanos Sammy Sosa, Aramis Ramírez y Moisés Alou, además de Kenny Lofton y el cubano Alex González.
Para esa misión, los “peces” escogieron al zurdo Mark Redman (0-0), quien aún no tiene récord en esta postemporada, pero es un pitcher muy inteligente.
Los Cachorros anunciaron al estelar derecho Kerry Wood (2-0), un hombre de una recta de humo -97 millas por hora- que se carateriza por dejar bastantes bateadores contrarios con la carabina al hombro.
Los Marlins eliminaron sorpresivamente en la primera ronda a los favoritos Gigantes de San Francisco tres victorias por una, mientras que los Cachorros apartaron a los Bravos de Atlanta.
Esta fue la primera vez que los Cachorros ganan una serie de postemporada desde que se impusieron en la Serie Mundial de 1908, cuando doblegaron a los Tigres de Detroit 4 a 1.
La victoria también puso al equipo de la “Ciudad de los Vientos” en una serie de campeonato en el Viejo Circuito por primera vez desde 1989, por lo que el deseo de imponerse es la única razón anidada en la mente de sus jugadores.
En tanto, los Marlins se encuntran en esta etapa del campeonato por segunda ocasión desde 1997, cuando finalmente doblegaron en el Clásico de Otoño a los Indios de Cleveland, 4-3.
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