“Ciudadanos de oro”
Yolanda Hurtado Jiménez
Felizmente, vamos acrecentando en nuestra sociedad el respeto hacia la persona adulta mayor, a la que se ha rendido homenaje a lo largo de este mes.
A las personas adultas mayores se las ha llamado “ciudadanos de oro”, y yo aplaudo ese nombre por considerar que representan a esa población de hombres y mujeres valientes que en el ayer, con sus limitantes humanas e históricas, dieron lo mejor de sí por la construcción de nuestro presente.
“Ciudadanos de oro” por su experiencia y cúmulo de historias, su vida, sabiduría, tenacidad, anécdotas y amor. “Ciudadanos de oro” en una sociedad pragmática, que no pocas veces los ha marginado y maneja sus propios criterios de producción para evaluar “cuánto vale” la gente, bajo estándares de deshumanización.
Una sociedad que los silencia, si preguntan varias veces lo mismo, y los critica porque su paso es ahora más lento. Una sociedad en que muchos de ellos quedan relegados, ridiculizados, y donde sus pensiones no son respetadas ni sus necesidades básicas atendidas.
Debemos reeducarnos, pues quienes hoy, en su época de juventud, no respetan a la persona adulta mayor, serán los adultos mayores del mañana, y la vida suele darnos aquello que hemos sembrado.
También hemos de pensar que la vejez, como todo en esta vida, no se improvisa, pues la virtud o la falta de ella son resultantes de las elecciones que a diario hacemos las personas. Mi calidad humana de hoy, cualquiera que sea mi edad, será mi calidad humana de mañana, cuando logremos ver la vida con ojos más mesurados y ritmos más serenos.
Ser “ciudadano de oro” es ser siempre lo que todos somos: ciudadanos de primera clase. Nuestros abuelitos y abuelitas tienen mucho que aportarnos. Necesitamos de sus consejos, picardía, amor, sencillez y tesón.
Y ellos necesitan de una sociedad, de una familia que los reconozca y haga participativa su existencia hasta el último momento, porque no nos alcanzaría la vida para agradecer a quienes sembraron primero lo que hoy es nuestra herencia: la vida, la patria, los sueños y los retos.
|