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Devoción en la calle
Decenas de nicoyanos recorrieron ayer a las 9 a.m. las principales calles del cantón, para celebrar el Domingo de Ramos, que marca el inicio de la Semana Mayor.
Rafael PACHECO/Al Día
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Marcha de fe Erick CARVAJAL M., enviado
ecarvajal@aldia.co.cr
Nicoya. De lejos, parecía que cientos de palmas sostenían la imagen de Jesús en el aire. De cerca, era posible observar a las decenas de personas que se turnaban para tener el privilegio de llevar en hombros al Salvador.
Con cantos y alabanzas, cientos de personas desfilaron ayer por la ciudad colonial de Nicoya, durante la procesión del Domingo de Ramos que marcó el inicio de la Semana Mayor.
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BENDICIÓN
La procesión del Domingo Ramos en Pital, San Carlos, recorrió a las 8:30 a.m. las calles del Barrio Disneylandia. Frente a una imagen de la Virgen María se bendijeron las palmas de los creyentes y también hubo misa en la parroquia San Antonio de Padua.
/Al Día
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A nivel nacional, más fieles también se unieron al inicio de un proceso de reflexión y penitencia. Al Día captó imágenes de esa celebración en Limón, Puntarenas y Pital.
El fervor nicoyano también se notó en la abarrotada iglesia. Quienes no encontraron espacio en las bancas, optaron por sentarse en el suelo, quedarse junto a los marcos de las puertas o de pie.
Afuera, todo era calor, sombrillas, pañuelos y vendedores de granizados. Nadie se perdió detalle de la celebración.
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Fidelidad
Los fieles puntarenenses desfilaron a las 10 a.m. en El Roble. El fuerte sol no aplacó las muestras de fe en el Puerto.
/Al Día
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La imagen de Jesús salió de la iglesia vestida de blanco y con una capa roja. A su paso, las señoras se persignaban, los niños se mostraban sorprendidos de ver a la imagen y algunos jóvenes parecían reflexionar sobre el rito. Otros hablaban del partido entre Guanacasteca y la Liga.
Varios hombres, que se turnaban en el recorrido, llevaron sobre sus hombros la imagen de Jesús, seguidos por cientos de personas que entonaban cantos religiosos. “El pueblo de Nicoya es muy devoto, gente humilde y buena. Aquí, todavía, se vive tranquilo”, dijo Gerardo Mora, regidor de la Municipalidad.
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Entre palmas
El Obispo de Limón, Monseñor Francisco Ulloa, caminó al frente de una nutrida procesión que partió del parque Asís Esna Miguel en Barrio Roosevelt. La foto se tomó ayer a las 9:00 a.m.
/Al Día
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La banda municipal hizo la caminata más alegre.
La imagen entró a la iglesia a las 9:15 a.m. Los nicoyanos, entusiasmados, movían sus palmas y el presbítero, Elquín López Alfaro, iniciaba la celebración litúrgica.
A partir de ayer y hasta el próximo domingo, Nicoya vivirá ocho días marcados por procesiones, cantos, tradiciones y fervor religioso.
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