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Seis personas fueron detenidos el 2 de octubre del 2003 por, supuestamente, formar parte de una las bandas más fuertes que ingresaba droga a la Zona Norte.
Foto ilustrativa/Al Día
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Droga era vendida por menores Álvaro SÁNCHEZ CÓRDOBA
alvarosanchez@aldia.co.cr
Ciudad Quesada. Investigaciones del OIJ indican que un hombre de apellido Araya, detenido el martes en la noche, tenía, al menos, a 10 personas a su cargo para la reventa de la droga en todo el cantón. La mayoría de esos distribuidores son menores de edad.
Además, se estableció que el Colegio Nocturno de San Carlos y sus alrededores eran el sitio favorito para la venta. Incluso, ahí se detuvo a una estudiante, el 12 de marzo anterior, con una gran cantidad de droga.
Se cree que Araya es el principal distribuidor de droga, al punto, que el OIJ afirma que la incidencia en la venta de droga bajaría en los próximos días.
El año pasado, esta oficina del OIJ realizó 48 operativos y ocupó el primer lugar a nivel nacional en allanamientos exitosos.
En marzo se realizaron cinco trabajos con seis detenidos, los cuales se encuentran descontando prisión preventiva.
El jueves 2 de octubre del 2003, esta oficina dio otro de los golpes más fuertes: se trata de una banda que ingresaba la droga a toda la Zona Norte. En esa oportunidad, se detuvo a seis personas, quienes, explicó el fiscal Henry Esquivel, traían la droga de Panamá. El mayorista, en este caso un hombre de apellido Ortiz, de Sarchí, la distribuía hacia varias partes del país. La mayor parte de la droga se venía en bus hasta Ciudad Quesada, donde los otros dos sospechosos, Zúñiga y Rojas, la recibían y repartían a quienes la vendían en la calle. Esta banda distribuía marihuana y cocaína, principalmente, y la policía les decomisó dinero, un arma y crack.
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