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Un gran arsenal encontró la policía, el lunes en la noche, en la casa de un exmilitar estadounidense, de 65 años, que se dedicaba a vender helados, en San Rafael de Guatuso.
Foto Ilustrativa/Al Día
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Detienen a exmilitar de EE. UU. Álvaro SÁNCHEZ CÓRDOBA, redactor
Vivian MEDINA, corresponsal
Guatuso.- Un exmilitar estadounidense, de apellido Villegas y de 65 años, fue detenido la noche del lunes anterior en San Rafael de Guatuso, por los delitos de violación calificada, corrupción de menores, difusión de pornografía y tenencia de armas prohibidas.
Por estos delitos, el Juzgado de Guatuso le impuso seis meses de prisión preventiva, confirmó la fiscal de ese cantón, Flor Hidalgo.
Según una fuente judicial, al hombre se le decomisó, en su casa, todo un arsenal como una carabina calibre 22 marca Marlin, un rifle Smith and Wesson, un revólver calibre 38 Smith and Wesson, un puñal de cacería de 20 centímetros, una gran cantidad de municiones para armas calibre 22 y 38 y un cartucho de escopeta número 12.
Además, se encontraron envases de pólvora, una caja metálica con 3.006 municiones para un arma calibre 38 y una caja con cartuchos de calibre 20, que no se contaron porque eran demasiados, según una fuente policial.
También se decomisó un equipo completo de limpieza para cualquier tipo de arma y una granada de fragmentación, que estaba desactivada.
El sospechoso fue detenido tras una denuncia que interpuso su hijastra, de nueve años y quien aseguró que fue víctima de algunos abusos cometidos por el detenido.
La hijastra relató a las autoridades que el lunes, tras la salida de las clases en la escuela de San Rafael de Guatuso, decidió irse a la casa de una compañera, por miedo de regresar a casa.
Según una fuente cercana a la familia, el hombre les mostraba revistas y fotografías pornográficas a ella y a sus dos hermanas, de 3 y 6 años.
Además, habría cometido otro tipo de actos frente a las menores, explicó uno de los encargados de la investigación.
El OIJ indicó que el sospechoso aprovechaba la ausencia de su compañera y madre de las menores, de apellido Martínez, para cometer las acciones.
Ella se encuentra aparentemente en Guanacaste, a donde se fue por problemas con su pareja, pero dejó a los niños. Nadie sabíaSegún la versión de la Fuerza Pública de Guatuso, nadie se imaginaba que un vendedor de helados que empujaba un carrito de una conocida cooperativa nacional, tuviera formación militar.
Los policías explicaron que frecuentemente llegaba a vender helados a esa delegación, y les indicaba como vestirse y la manera de acomodar sus insignias en el uniforme.
No obstante, ningún policía supo por qué hacía tan buenas observaciones, relató una fuente judicial.
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