Jueves 15 de abril, 2004. San José, Costa Rica.


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Juzgadores
El juicio de hoy le corresponderá al Tribunal de San José, conformado por Jeanette Castillo, Gerardo Segura y Alcides Mora.
Foto ilustrativa/Al Día

Conductor a juicio hoy

Rodolfo MARTÍN

Un conductor que no tenía licencia y conducía ebrio a exceso de velocidad, según figura en la acusación, comparecerá hoy a juicio para responder por tres homicidios culposos y dos lesiones graves debido a un accidente de tránsito en que se vio involucrado el 7 mayor del 2001.

Así lo confirmó ayer el Departamento de Información y Relacíones Públicas de la Corte Suprema de Justicia.

El imputado, de apellido Campos, acabó con la vida de Rebeca Yaomi Pasaperas Quirós,Tommy Zúñiga Granados y Lídier Delgado Cordero, de 4, 21 y 19 años, respectivamente.

Además, durante el accidente, ocurrido por las inmediaciones de las oficinas de Correos, en Pavas, también resultaron con lesiones graves Roberto López Cascante y Érick Solís Abarca, cuyas edades no trascendieron.

La tragedia

Campos departía con unos amigos esa tarde de mayo cuando, sorpresivamente, decidieron hacer una colecta para ir a traer más carne para hacer bocas.

Y fue así como abordó un auto con la intención de ir a compar la carne.

Lo acompañaron los muchachos antes mencionados: Zúñiga, Delgado, López y Solís. Asimismo, Sandro Sánchez Madrigal y Jefry Leonardo Aguilar Ramírez.

Al enrumbarse hacia la carnicería por la calle principal de Pavas, en sentido oeste-este, Zúñiga le pidió detenerse para bajarse con la intención de ir a su casa.

Y así ocurrió.

Campos y el resto del grupo siguió hacia la carnicería “Génesis” pero al llegar estaba cerrada por lo que dio la vuelta y regresó por la misma vía.

En un momento dado, se percató que Zúñiga caminaba por la acera y con la intención de hacerle una broma se dirigió hacia él a toda velocidad.

“ Sin embargo, como conducía a una velocidad excesiva y ebrio, perdió el control del del vehículo”, atropelló a Zúñiga y le arrebató de su mano a Grettel Quirós Hernández, a un hija Rebeca, de 4 años.

Ambos murieron en el sitio.

Acto seguido, y producto de la intempestiva acción, Delgado,quien ocupaba el asiento del acompañante del conductor, salió despedido por el parabrisas y también murió por el accidente.

López y Solís resultaron con fracturas, golpes y heridas de consideración, que ameritaron no solo incapacidades, sino que, incluso, pérdidas permanentes de facultades.

Inicialmente, en el juicio se plantearon acciones civiles resarcitorias superiores a los ¢135 millones, se informó en medios judiciales.

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