Lunes 26 de enero, 2004. San José, Costa Rica.



 

German Silva Montero

Joven muere en cancha de fútbol

Erick CARVAJAL MORA / Al Día

Germán Silva Corrales, de 24 años, murió ayer en la tarde debido a un paro cardiorespiratorio, tras caerse y golpearse la cabeza en una cancha de fútbol en Quircot, Cartago, producto de una riña entre los dos equipos que jugaban un partido amistoso.

El partido, que inició a la 1 p.m. llevaba diez minutos del segundo tiempo, cuando un roce entre Silva y un jugador del equipo contrario, de apellido Rivera, terminó en pleito.

Los dos equipos se enfrascaron en un zafarrancho y, en medio de todo, estaba Silva tirado en el suelo Y tendido en un rincón de la malla que circunda la cancha.

Al percatarse de esto, los jugadores de ambos equipos se hicieron a un lado y Silva estaba inmóvil.

“Unas personas lo atendieron y dijeron que estaba con el pulso bajo, se llamó de inmediato al 911, pero la ambulancia tardó más de 30 minutos en llegar. Mi hermano ya estaba morado”, dijo Jhonatan Montero Corrales.

German Silva Montero, de 24 años, murió ayer tras una riña que se armó en un partido que se jugaba, a las 2 p.m., en Quircot, Cartago. Rafael PACHECO / Al Día

Cuando llegaron las unidades de la Cruz Roja, trasladaron a Silva al hospital Max Peralta donde el joven murió a causa de un paro cardiorespiratorio. El joven también presentaba varios golpes en su cuerpo, cuello y cara.

Según la Fuerza Pública, cuando el grupo de jugadores se hizo a un lado, Rivera se quedó golpeando a Silva, por lo que fue detenido y llevado al OIJ de Cartago.

Integrantes de ambos equipos son investigados para determinar con exactitud quién le propinó los golpes mortales a Silva.

Agentes judiciales que se hicieron presentes a la cancha, también investigan si antes del partido los jugadores tomaron licor.

El hermano de Silva agregó que el anteayer los mismos equipos se habían enfrentado y también se habían presentado problemas entre ellos.

Édgar Leandro, presidente del Comité de Deportes del lugar, dijo que en estos partidos son frecuentes los problemas y que muchas veces han tenido que sacar a los árbitros escoltados con la Fuerza Pública.

Dolor en Quircot

German Silva Corrales era padre de tres niños, Danilo, Alexánder y Keneth. Su esposa Magally está embarazada de su cuarto hijo.

Ayer, a las 4 p.m., los gritos desconsolados de la madre de German se escuchaban en todo el barrio.

“Que dolor más inmenso siento Señor”, gritaba Elizabeth Montero, mientras era auxiliada por varias vecinas. Todo el barrio se encontraba conmocionado con lo sucedido.

Jhonatan, hermano de Silva, pedía justicia. “Quiero que se determine quién es el culpable de la muerte de German y que pague por lo que hizo”, dijo.

Silva era un joven honesto y humilde, según señala su hermano, y trabajaba en una fábrica de vidrios.

“Ahora mi cuñada quedó viuda con cuatro hijos y no sabemos qué vamos a hacer”, indicó el hermano.

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