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Gloria Trevi recibió el apoyo de su familia. En la foto aparece con su hijo Ángel Gabriel.
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Gloria Trevi no cumplió con su promesa: amenazó con hacer una huelga de hambre en señal de protesta porque el lunes las autoridades judiciales mexicanas no le permitieron salir de la cárcel, pero ayer prefirió buscar consuelo entre sus parientes. Así se lo confirmó a Al Día Rafael Pastrana, director del Centro de Readaptación Social de Aquiles Serdán (Cereso), vía telefónica.
Como era de esperar, la intérprete de “Pelo suelto” está triste, pero al menos ha logrado recuperar la calma. Según Pastrana, por motivos de seguridad no se le ha permitido conversar con ningún medio de comunicación. Vuelve la calma
–Gloria Trevi amenazó con hacer una huelga de hambre. ¿Llevó a cabo su promesa?
–A las 2:30 p.m. (de ayer), el abogado de Gloria me manifestó que desistiría de su intento. Probablemente, meditó esa decisión con más calma.
–En caso de que ella hiciera una huelga de hambre, ¿pueden interferir ustedes?
–Solo si corre peligro de muerte. De no ser así, nosotros respetamos las decisiones que toman los internos.
–¿Cómo está el ambiente en el Cereso en este momento?
–Desde el domingo, han llegado aquí varios medios de comunicación locales y extranjeros con el fin de conversar con Gloria Trevi. Pero por seguridad, a ella no se le permitió hablar con nadie de la prensa.
–El lunes, Gloria Ruiz (mamá de Gloria) dijo que su hija hablaría sobre los maltratos que se dan en el Cereso. ¿Qué opina al respecto?
–Desconozco esa información y no podría opinar al respecto. Es normal, cuando hay una situación incómoda –como la vivida por la familia tras la negativa del amparo–, que los ánimos se alteren y se digan muchas cosas, pero luego todo vuelve a la calma.
–¿La familia de Gloria Trevi la visitó?
–Ayer (lunes) y hoy (martes) han estado con ella, al igual que sus abogados.
–¿Ha podido conversar con Gloria Trevi para conocer sobre su estado de ánimo?
–No. Desde hace algunos días no ha sido posible platicar con ella. No queremos interrumpir las visitas de su familia, ya que eso es importante. Es natural que ella se encuentre incómoda o triste e incluso podría llegar a “explotar”, como cualquier ser humano, después de que tenía la ilusión de salir en libertad.
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