 |
Consulta
El Procurador General de la República a.i., Farid Beirute, avaló el abreviado para Carlos Hernán Robles. Atrás, su colega Amira Suñol.
Abelardo FONSECA/Al Día
|
Robles admite acusaciones Rodolfo MARTIN
rmartín@aldia.co.cr
Carlos Hernán Robles Macaya, exgerente general del desaparecido Banco Anglo Costarricense (BAC), se expone a una inminente cuarta condena consecutiva luego de que ayer optó por un juicio abreviado, que fue avalado por el Ministerio Público y la Procuraduría General.
Robles aceptó cada uno de los 70 hechos que le imputó la Fiscalía, como también la acción civil resarcitoria del Estado.
La fiscalía solicitó cuatro años de cárcel para cada uno de los 70 delitos de peculado, que se le atribuyen al exgerente. Eso significa 280 años de prisión.
Sin embargo, por la adecuación de las penas le queda en ocho años.
La acción civil, mientras tanto, no podrá ser menor a los ¢4 mil millones, monto de las pérdidas del BAC.
“No obstante, habrá que calcular también los intereses”, dijo la procuradora Amira Suñol.
A Robles, se le acusa de la supuesta aprobación irregular de sobregiros a un grupo de personas.
Los clientes abrían una cuenta corriente y luego, en el término de dos y hasta tres días, solicitaban un sobregiro que era autorizado por Robles.
No obstante, luego quedaría al descubierto que las letras de cambio, en todos los casos, resultaban incompletas o insuficientes.
Incluso, hubo clientes a quienes se les autorizó hasta dos o tres sobregiros.
Algunos de los apellidos más frecuentes que se escucharon ayer, como beneficiarios de estas anomalías son: Chanto, Rodó y Chaves, entre otros.
Ayer fue la cuarta ocasión que Robles fue a juicio. En los anteriores, había sido condenado.
-El 9 de octubre de 1997, a cuatro años de prisión por un delito de peculado, debido a la compra de una pantalla electrónica.
-El 20 de junio del 2001, se le impuso 24 años por 17 delitos de peculado, en la llamada causa principal del BAC.
Además, el jueves 5 de febrero fue condenado a 10 años por otros tres peculados. A Robles aún le restan dos causas más.
“Optó por el abreviado porque está moral y físicamente agotado. Lleva 10 años luchando en los Tribunales de Justicia”, comentó su abogada Mariana Brenes, de la Oficina de Defensores Públicos.
|
