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Imagen ilustrativa/Al Día
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Visión
Abogados y TLC Anabel González
En agosto pasado, la Junta Directiva del Colegio de Abogados publicó un acuerdo en el que indicaba que, a su juicio, el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (TLC) requería mayoría calificada para su aprobación legislativa en Costa Rica.
Dicho pronunciamiento provocó gran sorpresa entre los abogados.
Por un lado, según la opinión de muchos de ellos, las razones aducidas para justificar la necesidad de esa mayoría no tenían ningún fundamento. Por otro, la Junta Directiva no había promovido un proceso amplio y participativo para conocer el criterio de los abogados antes de emitir un pronunciamiento sobre el tema, pese a que cerca de un centenar de ellos así se lo solicitaron.
Esto último llamó particularmente la atención por tratarse no de cualquier organización gremial, sino de la de los abogados, que, por lo general, comprenden la importancia de respetar el debido proceso.
En todo caso, un par de meses después de hacer esa publicación, la semana pasada se efectuó un taller organizado por dicha Junta Directiva, para que los agremiados a ese colegio profesional analizaran los aspectos jurídicos del TLC.
Se integraron diversos comités que analizaron la votación requerida para aprobar el TLC en la Asamblea Legislativa, y también otros temas relevantes como la relación entre el tratado y la Constitución Política, el rompimiento de monopolios, la contratación pública, la propiedad intelectual, los temas laboral y ambiental, y, en fin, diversos aspectos de interés jurídico en el país.
La participación en el taller pudo haber sido más nutrida, pero, al menos, en esta ocasión el Colegio no dio cabida sólo a las opiniones contrarias al TLC, ni basó la discusión jurídica en el criterio de algún médico o economista, como lo ha hecho en otras ocasiones.
Estuvieron presentes varios abogados con criterios diversos y se llevaron a cabo, en muchos casos, discusiones interesantes. Además, se hizo un esfuerzo adicional y se trabajó en la elaboración de documentos que presentaron en el transcurso de la semana.
De este taller se derivan dos conclusiones importantes.
Primero: que no existe, en muchos casos, un conocimiento profundo acerca de varios de los aspectos legales relacionados con el TLC. Y segundo: que no hay un único criterio jurídico respecto a muchos de los temas discutidos.
En atención a ello, así como a la importancia que este tema tiene en la vida nacional, sería muy importante que el Colegio de Abogados publique ampliamente los documentos de carácter jurídico generados en ese taller.
De esta manera, mediante la divulgación de los diversos análisis legales sobre temas importantes del TLC, se contribuiría a profundizar el conocimiento en este campo.
Además, ello reflejaría adecuadamente la discusión jurídica existente en la actualidad, a fin de que la opinión pública conozca que hay criterios diferentes al que la Junta Directiva expresó anticipadamente, sin haber escuchado a sus agremiados.
Así, la Junta Directiva podrá contribuir con la primera función del Colegio de Abogados, que, según la ley, consiste en promover el progreso de la ciencia del Derecho.
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