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De pique
Paulo Wanchope y su equipo Málaga volvió a perder y ya se encuentra en zona de descenso.
Archivo/Grupo NaciónAl Día
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Málaga se hunde
Equipo de Wanchope sumó siete partidos sin victoria
Málaga, España / EFE. La visita del Albacete a Málaga confirmó la crisis del conjunto andaluz, que acumuló su sétima jornada seguida sin ganar y se asienta en zona de descenso, en favor del cuadro manchego, que tras conquistar su primer triunfo a domicilio de la campaña, se alimenta de oxígeno en la clasificación.
El público no tardó en reaccionar y al finalizar el duelo centró sus protestas en el palco y, concretamente, en el presidente Serafín Roldán.
Pero la victoria visitante fue justa. No escatimó esfuerzos por adquirir los tres puntos y con algo más de fortuna y de acierto el resultado hubiera sido mucho más amplio y el castigo mayor para el equipo de casa.
El Albacete sorprendió al Málaga en el inicio. Su predisposición y solidez sobre el terreno de juego vino acompañado de una inesperada ambición ofensiva evidenciada con la consecución del primer gol. El tanto no alteró la situación. Todo lo contrario. El cuadro manchego mantuvo su planteamiento y prolongó el dominio del juego al ataque. Angustia tempraneraEl tanto llegó en el minuto ocho. El francés Viaoud aprovechó un error de la zaga local para inaugurar el marcador. Ocho después volvió a cuestionar la meta del Málaga, pero el disparo de Mikel fue resuelto por Calatayud.
Diez minutos antes del descanso, un contragolpe culminado por Buades estuvo a punto de llegar de nuevo el segundo tanto visitante, pero su remate salió ligeramente alto.
El intermedio fue un respiro para el conjunto de Gregorio Manzano. Pero el panorama no cambió para los locales. Pronto llegó el nuevo revés para el equipo andaluz. Un error claro del defensa canterano Alexis sirvió a Momo para enfilar la meta de Calatayud y establecer el 0-2. La losa era ya demasiado pesada para el Málaga, que se quedó sin capacidad de reacción.
El Albacete se nutrió de tranquilidad y a pesar de ese momento ajustó su fórmula defensiva pero sin desechar las opciones de contraataque para propinar un mayor golpe a su rival, que buscó la meta visitante de forma alocada y con más intención que buen juego.
Sólo en el tramo final, a falta de cinco minutos, Wanchope disfrutó de una ocasión clara para batir a Gaspercic, pero el meta desbarató la mejor oportunidad malacitana del partido.
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