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Afectados
Un grupo de jóvenes reunidos ayer, a las 3:50 p.m., en un sector de la plaza de deportes de Costa de Pájaros, confesaron ayer que asistían a la casa del profesor Velásquez. Algunos dijeron que consumían mucho licor y las fiestas terminaban a las 4 a.m.
Allen CAMPOS/Al Día
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Proxenetas golpean Costa de Pájaros
Red desarticulada el miércoles Erick CARVAJAL MORA
Álvaro SÁNCHEZ CÓRDOBA
alvarosanchez@aldia.co.cr
Costa de Pájaros, Puntarenas.- “Éramos más de 20, unos de aquí, otros de Punta Morales, incluso vinieron de San Carlos. Esperábamos al profesor en su casa, salía a las 9 p.m. del instituto ...
Primero licor, películas pornográficas y luego… la fiesta terminaba a las 4 a.m., salíamos muy borrachos, otros se quedaban”, así describió ayer, a las 3:46 p.m., un joven de Costa de Pájaros lo que pasaba en la casa del maestro de matemáticas.
Tres hombres fueron capturados por la Unidad de Explotación Sexual del Ministerio de Seguridad Pública y la Fiscalía de Delitos Sexuales vinculados con una organización dedicada a la explotación y abuso de menores.
Aunque las autoridades dijeron el miércoles que al menos 45 menores habrían sido víctimas de estos hombres, el número puede ser mayor.
Reporteros de Al Día conversaron ayer con varios jóvenes que frecuentaban la casa del profesor Velásquez. Confirmaron que en algunas ocasiones llevaron jóvenes de San Carlos.
“Un día aparecieron tres 'maes' de San Carlos, uno quería acostarse con mi primo, pero él no quería”, dijo uno de los jóvenes, que no quiso identificarse.
Los sospechosos de esta red fueron identificados con los apellidos Rodríguez, 42 años, vecino de Guadalupe, Velásquez, de 40 años, quien vivía desde febrero en Costa de Pájaros, y un tercero, de quien las autoridades no han suministrado su apellido, de 19 años, quien vivía en Hatillo 3.
El primer capturado fue Rodríguez, el 8 de setiembre. Le decomisaron 60 fotografías y videos. Se le dictaron dos meses de prisión preventiva.
El segundo en caer fue el profesor de Costa de Pájaros. Su captura se efectuó el viernes 1 de octubre y el día de su arresto había tres menores en su casa. Descuenta seis meses de prisión preventiva.
El último capturado fue el hombre de 19 años, quien se hacía pasar por vendedor ambulante para tener acceso a los menores. Su detención tuvo lugar en Hatillo 3. Fiesta constanteVelásquez llegó a Costa de Pájaros en febrero de este año, al parecer, procedente de San Carlos. Su puesto era como coordinador de un instituto educativo el cual funcionaba en un horario nocturno en la escuela del lugar.
Alquilaba una casa cerca de la Iglesia Católica y desde su llegada los jóvenes empezaron a frecuentarla.
Ana Ruth Mendoza, vecina de Costa de Pájaros y síndica en la Municipalidad de Puntarenas, comentó que Velásquez vivía muy cerca de su casa y desde ese momento se empezó a ver actividad juvenil en su casa.
“Asistían muchos jóvenes y las fiestas eran constantes. La situación llegó a tal punto que los vecinos lo presionaron para que se fuera. Así que se fue a alquilar otra casa”, dijo Mendoza.
La situación es de gran preocupación en este pueblo puntarenense. “Es terrible saber estas cosas. Muchos sabían lo que pasaba, pero por temor no denunciaban”, comentó Mendoza.
Hace como un mes, dijo la síndica, habló con Velásquez.
“Me dijo que quería hacer un centro recreativo para los jóvenes de aquí, pensé, por un momento, que las cosas iban a cambiar, pero no fue así”, señaló.
Raúl Amuy, director de la escuela, comentó que con Velásquez tenía poca relación. Explicó que las funciones de este profesor eran muy administrativas, pero también daba unos cursos de matemáticas. Amuy aclaró que el instituto que funcionaba en la escuela, por las noches, no tiene ninguna relación con el centro educativo.
Las clases que impartía Velásquez se iniciaban a las 6 p.m. y terminaban a las 9 p.m. Durante todo el día la llegada y salida de jóvenes de su casa era constante. La actividad en la vivienda se incrementaba en la noche.
Sara Ledezma, una vecina de Velásquez, comentó que el pueblo de Costa de Pájaros está consternado. Ella pasaba todos los días por esa casa y observaba muchos jóvenes salir y entrar. La mayoría de ellos era del lugar.
“Esto nos deja como enseñanza que no se puede confiar en nadie y que los padres debemos estar muy alertas ante estas situaciones”, comentó. Golpe en El CarmenSilencio, indignación, impacto y temor. Son muchos los sentimientos de los vecinos de la urbanización Prusia, en El Carmen de Goicoechea, al enterarse que una vivienda cercana servía, según la investigación de la policía, para que un ingeniero se aprovechara de menores de edad.
En una casa esquinera, la policía encontró 60 fotografías y videos pornográficos.
“Yo tengo más de dos años de vivir aquí y nunca le hablé. Lo veía, pero nada más. Él era muy callado, casi no le hablaba a nadie.
En más de una ocasión llegaba gente a la casa, él decía, lo poco que hablaba, que eran amistades”, dijo un guarda de la urbanización.
– ¿Eran niños, adolescentes, jóvenes los que entraban a la casa?
-Parecían niños y jóvenes, pero parecían como de la calle, pues uno ve que son personas que andan en la calle por como visten, o bien, eran de muy pocos recursos. Qué hacían adentro, no sé, lo cierto es que con frecuencia se veía ese movimiento”, dijo el guarda que por temor no quiso identificarse.
Una vecina del sospechoso también manifestó su indignación con lo que estaba pasando en ese lugar.
“Ya uno no sabe si los niños de uno estaban a salvo. Estoy impactada, no lo podía creer hoy que leí la noticia. Él era callado, casi nunca se dejaba ver, no parecía extraño, la verdad nunca observé niños entrando a la casa, si se que lo visitaban mucho, pero no se si eran familiares o qué”, dijo la vecina.
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Doloroso
Esta mujer asegura que su hijo era uno de los que visitaban con frecuencia la casa del profesor de matemática detenido por supuesto proxenetismo, aseguró ayer a reporteros de Al Dïa.
Allen CAMPOS/Al Día
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“Mi hijo asistía a esa casa”
Frente a la plaza del pueblo vive una madre que ya no aguanta su dolor. Su hijo fue uno de los jóvenes que se vieron seducidos por las fiestas que les ofrecía el profesor Velásquez.
Ella tampoco quiso identificarse, tiene vergüenza. “El sábado, luego de la captura del maestro, mi hijo me confesó todo. Él y otros jóvenes asistían a esa casa, tomaban mucho licor, y salían a altas horas de la noche”.
La mujer nunca se imaginó que el profesor fuera una persona de ese tipo. “Incluso, estuvo viviendo durante diez días en mi casa, porque al principio, no tenía dónde vivir. Era una buena persona y un excelente educador, sus alumnos entendían muy bien la materia”, manifestó.
Ayer, a las 2:30 p.m., no podía esconder su dolor. “No sé por qué mi hijo estaba en eso, él no necesita nada, es un buen muchacho, muy inocente”, comentó.
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La casa
Esta es la casa del profesor de Matemática, en Costa de Pájaros, donde supuestamente era visitado por menores de edad y habían extrañas fiestas. la fotografía fue tomada ayer, a las 11:30 a.m.
Allen CAMPOS/Al Día
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“Éramos más de 20...”
Costa de Pájaros, Puntarenas.- A un costado de la plaza un grupo de unos seis jóvenes observaba ayer, a las 3:40 p.m., cómo cortaban el zacate. Dos de ellos frecuentaban la casa del profesor Velásquez. Para nadie en Costa de Pájaros es un secreto quiénes asistían a esas “fiestas”.
“El profesor era quien compraba el licor, incluso, en uno de esos encuentros, se llegaron a consumir hasta 26 botellas. Salíamos muy borrachos”, dijo uno de los muchachos.
De lunes a viernes, estos jóvenes frecuentaban la casa de Velásquez, durante el día y la noche. Después de las 9 p.m. empezaban a tomar. “En una oportunidad nos puso diferentes películas pornográficas. Imagínese lo que era estar borracho y viendo esas cosas, algunos cedían ante las peticiones del profesor, pero otros, como yo, no”, comentó.
Más de 20 jóvenes participaban en estos encuentros, incluso, en algunas ocasiones llegaron otros de San Carlos y San José. “Más bien ahora ya no tenemos a nadie que nos pague el licor”, dijo.
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