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La delegación de la Fuerza Pública de Boca Arenal detuvo, la madrugada de ayer, un bus con 50 nicaragüenses ilegales que se dirigían a Pérez Zeledón.
José RIVERA/Al Día
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Vigilarán en Boca de Arenal Marcela DELGADO, corresponsal
Ciudad Quesada.- Los tiempos de coger café se acercan, al igual que el sueño de miles de nicaragüenses de llegar a nuestro país en busca de un mejor futuro.
Por eso, la Fuerza Pública se prepara para impedir el ingreso masivo de indocumentados.
“Lo que hacemos es extender las caminatas por los mojones y por las zonas montañosas, como tenemos poco personal, no podemos poner puestos extra o dedicar policías fijos”, explicó el director regional de la policía, Édgar Hernández.
Añadió que los puestos que ya funcionan mantendrán la vigilancia las 24 horas para detectar cualquier ingreso.
“Durante el año hemos tenido muy buenos resultados, gracias a la coordinación interna; tenemos muy buena comunicación entre puestos y eso facilita el trabajo”, agregó Hernández.
Atribuyó parte de los resultados positivos a la coordinación con la Oficina Regional de Migración. “Carecemos de transportes para deportarlos y generalmente, cuando son muchos, se van en el bus de migración. Si son pocos, nosotros ponemos el transporte propio”, aseveró. Trabajo diarioEl interceptar nicaragüenses y deportarlos es trabajo diario para policías de diferentes puestos de la zona.
Solo en la delegación de Upala informaron que al menos cuatro nicaragüenses son detenidos cada día, por ingresar ilegalmente a tierras costarricenses.
En lo que va de este año, la Fuerza Pública devolvió a 1.435, en su mayoría hombres, por traspasar fronteras de forma ilegal.
El estadístico policial de San Carlos, Olivier Steller, informó que el 95 por ciento de los casos se registran en Los Chiles, mientras que un 3 por ciento del total de indocumentados intentan entrar a Costa Rica por Upala y el 2 por ciento son detenidos en Boca Arenal u otros lugares, como Boca San Carlos, Boca Tapada o Guatuso.
Precisamente fue en Boca Arenal, donde la madrugada de ayer se detuvo un camión que llevaba 50 nicaragüenses hacia Pérez Zeledón.
Según Alexander Artavia, policía de Boca Arenal, el camión burló dos puestos policiales en Santa Rosa de Pocosol, por lo que con un bloqueo, frente a la estación policial de ese distrito, fueron detenidos.
El camión era conducido por un sujeto de apellido Ruiz, vecino de Pérez Zeledón, quien llevaría a los nicaragüenses hacia su finca cafetalera.
Entre los deportados figuran 9 mujeres -dos de ellas embarazadas-, 13 niños y 28 hombres, quienes fueron recogidos en diferentes partes de los cantones de Los Chiles y San Carlos.
El grupo fue custodiado en el camión en el que viajaban hasta Los Chiles, donde quedaron a cargo de la Dirección Nacional de Migración y Extranjería y el mismo día fueron deportados a su país.
Hace solo 15 días, en Pital un bus con 45 indocumentados fue también devuelto.
La policía ya tiene identificados los lugares por los que entran con mayor facilidad.
También saben que la mayor parte de indocumentados provienen de pueblos muy pobres de Nicaragua, entre ellos Chontales, Los Chiles de Nicaragua, Azucena, y el Río San Juan.
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