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A Puntarenas
La hermana Nirmala cree en la necesidad de abrir un centro de las Misioneras de la Caridad en Puntarenas. Para eso urge reclutar misioneras.
Alexánder OTÁROLA/Al Día
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Mensajera de Dios en el país
Hermana Nirmala, sucesora de la Madre Teresa Neyssa M. CALVO ACHOY
ncalvo@aldia.co.cr
Las sonrisas de niños y adultos recibieron ayer a la hermana Nirmala, sucesora de la Madre Teresa de Calcuta, en el asilo de ancianos de las Misioneras de la Caridad, en Vázquez de Coronado.
La religiosa llevaba un chal negro sobre la espalda, sandalias azules de hule y en sus manos morenas medallas con la imagen de la Madre Teresa (beatificada por Juan Pablo II) y de la Virgen María, que obsequió a quienes se acercaban a pedir su bendición.
Su andar lento le permitió a muchos hablarle, entregarle presentes, estrechar su mano e, incluso, pedirle orar por sus necesidades. Entre estos últimos estuvieron Kathia Concha y Melvin Hidalgo, pareja que desea tener un hijo.
El consejo que recibieron fue pedir la intercesión de la Virgen María. También recibieron una medalla para que se la entreguen al bebé cuando nazca. Una muestra de fe.
Los ancianos del hogar recibieron a la hermana Nirmala con flores y con bailes típicos. Amor y oraciónNirmala Yoshi fue elegida superiora de las Misioneras de la Caridad el 13 de marzo de 1997.
Llegó a Costa Rica el sábado a las 10:30 a.m. Vino a visitar las obras que las integrantes de la orden desarrollan en Limón y en Coronado. En los dos sitios se trabaja con indigentes y ancianos.
“Mi mensaje para la gente es que Dios tiene mucho amor para cada uno. Deben confiar en Él, rezar y amar como Él quiere”. Ayer, a las 2 p.m., partió hacia Nicaragua. Hoy llegará a Honduras para “dar fuerza a los colaboradores, ver qué hacen, y dar gracias a todos”.
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