|
Mucha mano de obra Unas 10 personas trabajaban ayer a las 3:15 p.m. en la construcción de dos casas en el Residencial AltaMoravia. Según el maestro de obras Guillermo Durán, hay épocas en las que llegan hasta 20 personas diarias a pedir trabajo. Allen CAMPOS para/Al Día
|
Más empleos, pero insuficientes
Informe del Estado de la Nación Mónica UMAÑA D. monicau@aldia.co.cr
Hannia Vargas cree que su edad, 45 años, es la culpable de que ella tenga ocho meses desempleada. Ella posee un certificado en enfermería y habla inglés. Pero nada le ha servido para colocarse en el mercado laboral.
Pablo Fernández, de 27 años, se graduó hace más de un año como técnico en computación, y aún espera que lo llamen de alguno de los lugares donde ha entregado su curriculum. Según él, la falta de experiencia juega en su contra.
Guillermo Durán trabaja en una construcción en Moravia, y aseguró que hay épocas en las que llegan hasta 20 personas diariamente pidiendo trabajo.
Estos tres casos reflejan las estadísticas nacionales: en los últimos 10 años, el número de desempleados se duplicó, y pasó de 54.866 a 117.191, según consta en el más reciente informe Estado de la Nación en Desarrollo Humano Sostenible.
El documento, divulgado el martes, hace un balance de la situación del desempleo en los últimos 10 años, e indica que en materia de política de empleo han faltado lineamientos claros, que garanticen una política nacional en esa materia a largo plazo.
Además, señala que la transición hacia un mejor acoplamiento entre la oferta y la demanda de trabajo requiere, entre otras cosas, la aplicación de una política nacional de empleo, la cual no había sido formulada.
Se intentó conocer la versión sobre el tema del Ministro de Trabajo, Fernando Trejos, pero está en la Reunión de Ministros de Trabajo de Centroamérica y República Dominicana, que se celebra en México. Se le enviaron las consultas vía correo electrónico, pero hasta anoche no obtuvimos respuesta.
El Estado de la Nación afirma que los empleos generados en los sectores más dinámicos de la economía, como las industrias de zona franca, la agricultura de exportación y el turismo, no han sido suficientes para compensar la pérdida de oportunidades laborales en otros ámbitos.
En consecuencia, la tasa de desempleo abierto en el 2003 fue de 6,7%, la más alta de las dos últimas décadas.
En el caso de Pablo Fernández, necesita trabajo para mantener a su esposa; mientras que Vargas debe velar por su hijo menor que está en el Colegio.
Precisamente son las familias quienes sufren las consecuencias de la falta de empleo, tanto por la inestabilidad de los ingresos, como por la falta de cobertura de seguro social.
“Mientras los trabajadores vinculados a algunos sectores gozan de estabilidad, oportunidades y buenas remuneraciones, muchos otros viven situaciones de incertidumbre, bajos ingresos y escasas oportunidades”, indica el décimo Informe de la Nación.
|
Sin suerte Hannia Vargas tiene 8 meses buscando trabajo como enfermera. Allen CAMPOS, Para /Al Día
|
Tres caras del problema
“No sabía que era tan difícil encontrar trabajo, he ido a dejar el currículum y no me llaman”, relató ayer Pablo Fernández, un técnico en computación que se graduó hace más de un año.
A sus 27 años, Fernández cree que la juventud y falta de experiencia le impiden colocarse rápido en un trabajo.
“¿Para qué quieren gente con experiencia que ya tiene malas mañas, y descartan a la gente inexperta?”, se preguntó Fernández, quien hace pequeños trabajos en su casa, para complementar el salario que su esposa gana trabajando por horas.
La cara femenina de la historia la tiene Hannia Vargas, de 45 años. Ella regresó hace 8 meses de Estados Unidos, donde vivió 18 años y se desempeñó como asistente de enfermería.
“La experiencia no es suficiente, a pesar de que soy bilingüe no he podido encontrar un trabajo. Lo más triste es la discriminación con las personas mayores”, explicó Vargas, quien desde que regresó al país ha estado viviendo con el dinero que se trajo de Estados Unidos.
Mientras, en el Residencial AltaMoravia se construían ayer varias casas. Guillermo Durán, maestro de obras, relató que existen épocas en las que llegan hasta 20 personas a pedir trabajo en construcción, sobre todo los lunes y martes cuando se acerca el fin de año, ratificándose así la necesidad de empleo que existe entre los costarricenses, y quienes vienen a nuestro país en busca de oportunidades.
|
A las 3 p.m. Mainor Castro trabajaba ayer en construcción en Moravia. Allen CAMPOS, para/Al Día
|
Perfil de los desempleados Fuente: Estado de la Nación
El año pasado, el 62,3 % de los desocupados residía en el área urbana y el 37,7 % en el área rural.
Del total de desempleados en el 2003, un 18,9 por ciento correspondía a personas que buscaban trabajo por primera vez.
El 54,6% de las personas sin empleo tiene edades entre los 16 y 25 años.
Disponer de mayor educación no necesariamente garantiza la obtención de un empleo. Existe un 24,6% de desempleados con secundaria completa o mayor nivel educativo.
|