Jueves 28 de octubre, 2004. San José, Costa Rica.


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Foto Principal: 836444
Sin piedad
Juan Manuel Peña fue asesinado ayer, a las 3 a.m., por varios hombres, aún no identificados, los cuales lo abandonaron en una calle solitaria cerca de donde se construirá el nuevo estadio de Limón.
Róger AMORETTY/Al Día

“Pirata” muere apuñalado

Quinto asesinado en Limón este año

Erick CARVAJAL, redactor
Róger AMORETTY, corresponsal

Limón.-Mientras sus asesinos salían a toda velocidad del montazal donde lo dejaron abandonado, Juan Manuel Peña trataba de mantenerse con vida.

Caminó unos 400 metros con dos puñaladas en su pecho, desesperado, mal herido trató de buscar ayuda, pero sus fuerzas lo abandonaron y murió boca arriba, ayer, a las 3 a.m., en una calle de pavimento cerca del sitio donde se construirá el nuevo estadio de Limón.

El cuerpo de Peña, de 35 años, fue encontrado en ese solitario lugar, ubicado a 150 metros de la entrada del INA, ayer a las 3:15 a.m., por una patrulla de la Fuerza Pública que hacía una visita de rutina.

Además:

  • “Mucho dolor”
  • José Elizondo, oficial de la Fuerza Pública de Limón, comentó que siempre realizan un recorrido en esa calle, de kilómetro y medio, por ser un sitio solitario.

    Algunos taxista “piratas” que llegaron a la escena del crimen, pero que no quisieron dar sus nombres, dijeron que están cansados de ver como matan sin piedad a compañeros que trabajan para ganarse la vida.

    “Es una situación que se ha vuelto incontrolable. Tenemos temor pero estamos obligados a trabajar por nuestras familias”, comentaron.

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    Juan Manuel Peña/Al Día

    Las autoridades judiciales encontraron el cuchillo que usaron los asesinos de Peña cerca del sitio donde el taxista fue apuñalado.

    El arma blanca es tipo serrucho, usado comúnmente para cortar pan, y tiene un tamaño de unos 15 centímetros. El mismo tenía rastros de sangre.

    Además de las heridas en su pecho, Peña tenía cortados los dedos de su mano derecha, señal, según la policía, de que forcejeó con sus criminales e intentó defenderse.

    Uno más

    Peña es el quinto taxista informal que muere en este puerto en lo que va del año.

    El automóvil que conducía, un Hyundai Elantra verde, modelo 91, fue encontrado ayer, a las 10:35 a.m., un kilómetro al sur del puesto de la Fuerza Pública en Sixaola.

    Tras la inspección judicial del cuerpo de Peña, los agentes comentaron que Juan Manuel no portaba ningún documento, tampoco tenía su billetera, lo que hace suponer que el robo fue el móvil de este asesinato.

    Un guarda, ubicado en la entrada del INA, comentó que vio salir de esa calle, como a las 3 a.m., un automóvil Hyundai a toda velocidad.

    En su interior pudo ver a varios hombres.

    El cuerpo de Peña fue levantado a las 10:10 a.m. por la policía judicial, quienes además, montaron todo un operativo para dar con los asesinos de este taxista.


    “Mucho dolor”

    Vita Siles no puede creer que ya Juan Manuel no estará más con su familia. Ayer, a las 11 a.m., oficiales judiciales la fueron a buscar a su casa, para que reconociera a su esposo, con quien compartió 17 años de su vida.

    ”No puede ser que en Limón estén asesinado a personas buenas, que se ganan la vida honradamente”, dijo Siles.

    Juan Manuel Peña tenía año y medio de ser taxista.

    Antes había laborado para varias empresas de carga en el muelle de Moín. El Hyunday Elantra que conducía no era de su propiedad, ya que pertenecía a otra persona que se lo prestaba para ganarse la vida.

    “Juan siempre fue un padre cariñoso, muy atento con sus hijos, buscada la forma de que no les faltara nada”, comentó la esposa.

    La última vez que lo vio con vida fue anteayer a las 11 p.m. ”Vino a la casa para ver si estaba estudiando, me preguntó que si ya había comido y luego se fue”, manifestó Siles.

    Ella no se preocupó ayer en la mañana, al ver que su esposo no había llegado. ”A veces aparecía temprano, otras veces no llegaba a la casa, por eso no pensé nada malo”.

    Peña tenía cuatro hijos y vivía desde hace cuatro años en la urbanización Pacuare Nuevo.

    Su esposa está preocupada, pues no cuenta con los medios suficientes para enterrar a su esposo, así que dio el número 795-1601, para recibir cualquier ayuda.

    ”No trabajo. Lo único que hago es estudiar, trato de sacar el noveno año en un instituto y mis hijos son muy pequeños, no sé qué voy a hacer”, dijo.

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