Butaca 1
Tropezón Leonardo Perucci
Debe ser, gracias a las cadenas de televisión de Estados Unidos y a las de muchos países, el tropezón más publicitado en la historia de los tropezones, si es que existe una historia de los tropezones, y, si existe, creo que nuestros “ángeles” estarían en primera fila.
Pero hoy vamos a hablar de un angelote de verdad, color verde olivo, de casi dos metros de estatura física e incontables centímetros en cuanto a su moral.
El comandante..., sí, el mismo que “mandó a parar” cuando Cuba era el burdel de los Estados Unidos, tropezó al bajar de una tarima en un acto dedicado a exaltar el trabajo de la juventud, y dio con su humanidad en el suelo fracturándose la rodilla.
Esta escena se repitió hasta el cansancio en todos los medios de comunicación, no solo en Estados Unidos, en todo el mundo y en nuestra Costa Rica, con la cara de complacencia de uno de nuestros más promocionados presentadores de televisión.
Por supuesto que no hablaremos de estos tropezones cubanos, hablaremos de un milagro cubano, del que poco se sabe, y no por casualidad. Hablaremos del “Plan Milagro”, del cual se han hecho muchos reportajes y hasta un documental.
Cuba ha enviado a Venezuela varios miles de médicos que se han instalado en las zonas más humildes. Misioneros que cobran el mismo sueldo (modesto de país bloqueado) que cobrarían en Cuba, y que viven en el mismo barrio pobre de sus pacientes. Muchos de éstos padecen enfermedades de los ojos y se han quedado ciegos..., ciegos por pobres, porque su ceguera se cura con facilidad, sobre todo cuando son cataratas.
En Cuba hay equipos muy especializados que operan en 10 minutos esa afección. Se decidió entonces enviar desde Venezuela a Cuba a esos pacientes, acompañados de un familiar, para ser operados y todo esto... gratis.
Ya son más de 5.000 personas que han recuperado la vista después de decenios de oscuridad.
Ojalá más de un periodista o político de nuestro país decidiera operarse en Cuba para ver si sale definitivamente de la oscuridad y se asoma al futuro de la humanidad.
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