|
Hallazgo En este hotel, en el centro de San José, la policía encontró a 6 menores colombianos y a un nicaragüense, con dos adultos. José RIVERA/Al Día
|
Ordenan repatriar a 8 menores
Colombia investigará cómo llegaron a Costa Rica Álvaro SÁNCHEZ CÓRDOBA alvarosanchez@aldia.co.cr
El Juzgado del Primer Circuito Judicial de San José ordenó ayer que ocho menores colombianos que permanecían bajo su custodia, sean entregados al Consulado de Colombia en Costa Rica, para que se tramite su repatriación.
Estos menores, cuyas edades oscilan entre 4 y 17 años, se encuentran en albergues del Patronato Nacional de la Infancia (PANI) desde el 14 de agosto anterior.
Rosalía Gil, presidenta Ejecutiva de esa institución, recibió ayer a las 4:44 p.m. un documento que le solicita entregar de inmediato a los menores.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (homólogo del PANI en Colombia) investigará las causas por las cuales ocho menores de edad se encontraban ilegalmente en Costa Rica, confirmó ayer Marta Lorena Padrón, funcionaria de esa dependencia, a Al Día. Hotel y carroSeis de los menores fueron encontrados el miércoles 22 de setiembre anterior en un céntrico hotel de San José, junto a dos colombianos, de apellidos Caviedes y Giraldo y de 42 y 37 años, respectivamente.
A estas dos personas, según la resolución del juez, no se les seguirá ningún proceso por tráfico internacional de menores, como lo solicitó el PANI, pues no hay elementos que prueben ese delito.
Asimismo, no se les podría seguir un proceso por “coyotaje”, pues en el país no existe una legislación que permita sancionar esa actividad.
A los dos hombres se les puso a las órdenes de Migración para que sean deportados en el momento que resuelvan su situación.
Otros dos hermanos colombianos, que pertenecían al mismo grupo, fueron localizados en un puesto fronterizo de la Zona Sur dentro de un vehículo, acompañados de un costarricense de apellido Segura, quien fue denunciado por tráfico internacional de menores.
Ellos viven desde hace más de un mes en el albergue de Corredores, Zona Sur, y hasta hoy serían trasladados a San José para que se unan al grupo de menores que viajará a Colombia.
Los ocho conformaban un solo grupo que, aparentemente, salió de Colombia desde julio pasado. Según su relato, salieron de paseo con cuatro adultos, estuvieron en varias playas de Panamá por cerca de un mes y luego decidieron ingresar a Costa Rica.
En David, Panamá, los dividieron en grupos, pues no cabían en un solo vehículo.
A Costa Rica ingresaron por Paso Canoas, pero evadieron el puesto de control migratorio.
Tras evadirlo, dos fueron detenidos unos kilómetros después. El resto logró instalarse en un hotel de la capital.
Gil confirmó ayer que debe hacer entrega inmediata de los ocho menores al Consulado, es decir, que la salida hacia Colombia podría darse mañana.
“Estos trámites son muy rápidos. Los niños los debemos entregar al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, donde sabemos que se iniciará una investigación para determinar cómo salieron y por qué estaban en Costa Rica”, explicó.
Según el relato de los niños al Ministerio Público, iban hacia Francia a encontrarse con sus padres. Los hermanos que están en Corredores aseguraron que estaban de paseo y que pensaban viajar a España a visitar a su madre, quien vive ahí ilegalmente.
El padre de estos menores, de apellido Agudelo, confirmó al PANI que envió a los menores de excursión a España, por lo que resulta extraño que estuvieran en Costa Rica (ver recuadro).
La cónsul de Colombia en San José, Vilma Ávila, confirmó que los menores portan pasaporte y pasaje de regreso a su país. “Aún no conocemos las razones del por qué llegaron aquí. Eso corresponderá a autoridades de nuestro país indagarlo, nosotros solo nos encargamos de velar por ellos”, comentó.
Este año, 21 menores colombianos, ecuatorianos, peruanos y guatemaltecos ilegales han sido hallados en el país. La policía sospecha de un tráfico de niños a Estados Unidos.
En una agencia de viajes
Los familiares de varios de los menores están consternados por la travesía que han seguido.
La mayoría ni siquiera se explica cómo llegaron a Costa Rica y de manera ilegal.
Uno de ellos es el padre de los hermanos Mayra y Julián, de 13 y 15 años.
El hombre, de apellido Agudelo, dijo a la encargada de la oficina del PANI en Ciudad Neilly, Dinia Vallejos, que envió a sus hijos de paseo a España.
Según la información recopilada en los expedientes, los niños viven en un barrio de Cali, Colombia. Salieron de Bogotá con rumbo a España, donde vive indocumentada la madre de los niños.
“Él me dice que no comprende cómo están en Costa Rica. El señor está muy consternado por la situación, pero igual uno no comprende cómo manda solos a dos niños supuestamente a España”, explicó Vallejos el viernes 17 de setiembre anterior.
Aparentemente, el padre de los menores asegura que pagó la excursión en una agencia de viajes de su país y que ahí le ofrecieron llevar a su hijos hasta España.
Mayra y Julián intentan llevar una vida normal, pese a estar lejos de su casa en Cali. Juegan, comparten, van a paseos y conversan casi a diario con sus padres por teléfono, comentó Vallejos.
|