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El cielo generoso barrió un poco las nubes y nos dio esta vista en Playa Zancudo, a las 5:02 p.m.
Allen CAMPOS, para/Al Día
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Tiempo traicionero
Nubosidad impidió ver el esplendor del eclipse solar de ayer Guiselly MORA, enviada
gmora@aldia.co.cr
Playa Zancudo, Puntarenas. Nadie tuvo que pagar para presenciar uno de los espectáculos más maravillosos de los últimos 200 años: un eclipse en tres presentaciones. Se trata de un fenómeno "híbrido", es decir, en algunos lugares fue total, en otros -incluida punta Burica- apareció como anular y las zonas fuera de la franja principal gozaron un eclipse parcial.
Si bien las nubes impidieron ver la fase más llamativa -la anular- como enorme telón en un escenario oscuro, a las 5:02 p.m. se abrieron y dieron paso al final de la función. A esa hora, nuestro satélite le daba un mordisquito a la parte superior del astro rey.
Contra las predicciones meteorológicas, según las cuales estaríamos apostándole a una causa perdida, pudimos ver el eclipse en una de las partes más cercanas a punta Burica: playa Zancudo.
Roger Corrales Castro y Ángela Cedeño Porras, quienes viven desde hace 16 años en este edén, tan al sur que casi cruzan la frontera, se conformaron con escuchar los gallos cantar a las 3:45 p.m. y esperar los 20 minutos en que la tarde se hizo noche... hasta que por fin, a las 4:15 p.m., el firmamento volvió a aclararse y las gaviotas regresaron al vuelo. Como de nocheAquí se vivió una oscuridad casi total, que en lugar de una madrugada culminó con un lindo atardecer.
Los pocos visitantes que transitaban a las 2 p.m., por la calle que da a playa Zancudo,pueblito pintoresco de gente muy amable, se preguntaban si el cielo sería generoso y dejaría al Sol cumplir con la danza prometida. No obstante, la nubes y la lluvia llegaron y los obligaron a esperar hasta las 4:22 p.m., cuando unos rayitos se abrieron campo en el encapotado horizonte. A esa hora, según el milenario almanaque natural, la fase anular ya había terminado.
Aún así, al filo de las 5 p.m., apenas para no dejarnos con las ganas, el viento sopló y sopló para abrir un agujero luminoso y cerrar un evento que volverá a suceder hasta que la Luna pueda volver a alinearse perfectamente entre la Tierra y el Sol y regalarnos otra hermosa travesura.
En otras partes
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Gallinas confundidas en Panamá.
AP/Al Día
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La Habana, Cuba.
EFE/Al Día
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Managua, Nicaragua.
EFE/Al Día
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