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Escenario Osmar Vallejos Machado, de 17 años (abajo), había estado jugando billar antes de ser atacado por dos desconocidos. Un ambiente de duelo envolvía ayer a sus familiares y amigos. Christian CAMPOS/Al Día
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Asesinan joven en Herradura Christian CAMPOS, corresponsal Rodolfo MARTÍN rmartin@aldia.co.cr
Garabito, Puntarenas.- Osmar Vallejos Machado, nicaragüense de 17 años, hijo de un pastor evangélico, murió asesinado ayer de una puñalada, en el bar Los Pooles, en Herradura.
Como sospechosos figuran dos sujetos, al parecer nicaragüenses, que no son conocidos en la comunidad y que desaparecieron del lugar después de los hechos.
Vallejos fue apuñalado cerca de la yugular derecha; eso le causó una grave hemorragia.
El adolescente había llegado al billar cerca de las 11:30 p.m. En algunos momentos jugaba y en otros observaba jugar a sus amigos.
Al instante del ataque Vallejos permanecía sentado en una silla plástica blanca a la espera de su turno.
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/Al Día
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Una cliente del bar, que prefirió no revelar su nombre, dijo a Al Día, que "todo transcurría normalmente cuando entraron unos hombres matoneando. Escuchamos una gran bulla y, de un momento a otro, agarraron a Osmar por la espalda y lo apuñalaron sin darle ninguna oportunidad".
El joven, al parecer, dijo: "muchacha, me cortaron, me cortaron", mientras intentaba levantarse de la silla.
Incluso, una vez apuñalado los desconocidos pretendieron cortarlo más con una botella.
Pero, Luis Suárez, un vecino, interpuso su mano y resultó herido.
Osmar caminó 10 metros en busca de ayuda, pero cayó cerca del teléfono público que está afuera del negocio.
Algunos testigos lo siguieron, mientras otros llamaban al 911 donde les recomendaron que le pusieran un paño limpio en la herida.
Empero, murió pocos minutos después.
Los testigos manifiestan que todo ocurrió muy rápido, aunque recuerdan que los agresores también eran jóvenes, morenos, uno vestía camiseta color vino y el otro camisa blanca, con pantalones negros".
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DOLIDA Doña Santana Machado, madre de Osmar, observaba ayer, con desconsuelo, una foto de su hijo donde aparece al lado de don Justo, su esposo. Christian CAMPOS/Al Día
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Iría de compras a "Chepe"
Garabito, Puntarenas.- La alegría con que las tres hermanas de Osmar Vallejos Machado esperaban este domingo se les apagó cuando recibieron la noticia de su muerte. El joven les había prometido que iría a San José a traerles ropa nueva a todas.
"Mami, me despierta temprano mañana, porque voy a ir a 'Chepe' y a usted le voy a traer un regalito" le dijo cuando su mamá llegó del culto, el sábado a las 8 p.m.
El joven nicaragüense se ganaba la vida, haciendo lo que le gustaba: construyendo.
"Era un apasionado de la ebanistería y como peón de construcción, el contratista siempre le encargaba los trabajos con la madera" manifestó su padre, el pastor evangélico, Justo Vallejos.
"A nosotras nos había hecho un perrito de madera que lo tenemos en nuestro cuarto" comentó Sarita, la hermana de 10 años.
La familia Vallejos Machado, está compuesta por don Justo, doña Santana, y sus hijos Osmar, Maryelin de 14 años, Elizandra (13) y Sarita. Ellos salieron en 1999, de su natal San Pedro, en Puerto Borda, Nicaragua, cuando el huracán "Mitch", los obligó a buscar nuevas tierras. Su tierra había quedado devastada y tenían que empezar a vivir de nuevo. Y lo empezaron a hacer, bajo el techo de una Iglesia que pastorea don Justo, en Herradura.
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