Balacera pasional en parqueo de Palí

Conserje baleada por error

También dispararon a un hombre en el hombro

Desamparados. - María Catalina Figueroa, de 46 años, corrió cuando escuchó la balacera, pero una de las balas, que no eran para ella, le penetró por el costado derecho, ayer, en el parqueo del Palí en San Miguel de Desamparados, a la 1:30 p.m.

Un hombre, identificado por la policía como de apellido González, lleno de celos, entró al supermercado a dispararle a Jonathan Quesada, de 19 años, y a su exnovia Yuliet López Muñoz, de 19 años.

El hombre les disparó en seis oportunidades, con un arma calibre 22. Una de las balas impactó a Quesada en el hombro, y otra, lo que llama la policía, una bala perdida, hirió a Figueroa.

La mujer, quien había terminado de hacer las compras en el Palí, se disponía a tomar un autobús para irse al trabajo.

Venía caminando por el parqueo, cuando vio la moto de González entrar a toda prisa y dispararle a la pareja. Ella salió corriendo, pero una de las balas la alcanzó. Fue trasladada en condición delicada al Hospital San Juan de Dios. Fue reportada en condición delicada, pero estable.

Quesada fue llevado a la Clínica Marcial Fallas, en Desamparados, donde fue reportado en condición estable.

Manuel Corea, padrastro de Quesada, comentó que Yuliet y Jonathan tienen unos seis meses de relación, y nunca supo que su hijastro tuviera algún problema.

López fue llevada a la Comandancia de Desamparados y, luego ,a las oficinas del OIJ en San José, donde fue indagada.

Las autoridades presumen que el motivo de la agresión fue un problema pasional.

Casquillos del arma en el parqueo del Palí en San Miguel de Desamparados. R.Pacheco

"Ella iba para su trabajo"

Tatiana González, hija de María Catalina Figueroa, vio pasar corriendo a su mamá en medio de la balacera, pero nunca se imaginó que estaba herida. Ella estaba sentada en un automóvil, con las compras que había hecho minutos antes, y, después de los balazos, se fue a su casa.

"Vi a mi mamá entrar al Palí y supuse que nada malo le había pasado. Entonces, me vine con mi sobrina a la casa", comentó Tatiana.

María Catalina Figueroa tiene ocho años de vivir en Costa Rica y se dedica a limpiar oficinas en Santa Ana.

"Estamos muy preocupados por ella. No puede ser que hasta en un supermercado resulte herida una persona por una balacera", comentó la hija.

Ella hace las compras con su madre, ya que es la única hija que vive con ella. "En mi casa somos nosotras y mi papá. Fuimos al Palí porque no queríamos ir a otro que queda cerca de la casa, al que siempre vamos", dijo la hija.

María Catalina se recupera en el Hospital San Juan de Dios. Recibió un balazo de un arma, calibre 22, la cual la hirió en un costado. "Fue trasladada delicada a la clínica de Desamparados, pero la estabilizaron en el San Juan", según afirmó Tatiana.