Intento de homicidio en La Cruz, Guanacaste

Policía detuvo a sospechosos

Víctima, por no poder hablar, apeló a la escritura

La Cruz, Guanacastecia. - Dos hermanos y un primo hermano, todos detenidos, figuran como sospechosos del intento de homicidio en perjuicio del policía Óscar Barrantes Duarte, ocurrido aquí el viernes por la noche.

El guardia civil, de 39 años, recibió dos impactos de bala: uno que le ingresó por el pómulo derecho y le salió por la boca, y el otro que le entró por un glúteo y le salió por el estómago.

Inicialmente, la policía carecía de información acerca de los responsables, pues Barrantes no podía hablar y, después de ocurrido el hecho, en el lugar imperó la ley del silencio.

El fiscal coordinador de la investigación, Ricardo Quirós, ordenó una entrevista por escrito, y a partir de ese momento fue cuando trascendió la versión del ofendido.

Como sospechosos figuran dos hermanos de apellidos Mairena y un primo suyo, apellidado Castillo, confirmaron ayer fuentes policiales.

El OIJ de Liberia comisionó a la Fuerza Pública de La Cruz, y sus miembros fueron los encargados de detener a los sospechosos, que son considerados, dentro del ´ámbito policial, como una familia supuestamente problemática. Ayer estaba por resolverse la situación jurídica de los tres.

Los hechos ocurrieron en el bar Nuevo Palermo, negocio ubicado en el fronterizo poblado de Las Vueltas.

Barrantes, oriundo de la zona, había sido policía ahí, pero, al parecer, debió ser trasladado a otro lugar por problemas con esta numerosa familia.

El viernes, había regresado al pueblo con la intención de pasar el fin de semana al lado de su familia, la cual vive, justamente, al lado del bar.

La labor de la policía, incialmente, está sustentada en las declaraciones por escrito del ofendido, aunque no se descarta la opción de algunos testimonios y reconocimientos.

La acción de los investigadores transcurre con mucha cautela, debido a que los amigos y familiares de los sospechosos podrían incurrir en amenazas en contra de los investigados, informaron ayer fuentes cercanas al caso.

Al policía lo bajaron de un banco, y unos seis u ocho individuos la emprendieron a patadas.