Dueño de local acusado de homicidio simple

Chino mata a ladrón por ventana de abastecedor

Le pegó un balazo en la mitad de la frente, cuando lo vio asomarse a la pulpería

Alajuela. - Alertado de los asaltos y robos, un chino de apellido Cheng no lo pensó dos veces para dispararle a un hombre, apellidado Torres, de 21 años, ayer, a las 12:56 a.m., quien, al parecer, pretendía meterse a robar en el abastecedor La Famlia, en Lotes Murillo, en Villa Bonita de Alajuela.

Torres recibió un balazo en medio de la frente mientras estaba de pie en su bicicleta y, al parecer, pretendía meterse a robar a través de una ventana del abastecedor. La Cruz Roja lo trasladó en condición delicada al hospital de Alajuela, luego de un intenso trabajo para mantenerlo con vida.

Sin embargo, Torres murió a la 1:22 a.m. en ese centro médico.

Cheng fue detenido y trasladado a las celdas del OIJ, donde permaneció hasta la tarde de ayer.

La fiscalía lo acusa de homicidio simple y le impuso varias medidas cautelares: debe presentarse a firmar cada 15 días y tiene impedimento de salida del país.

Según uno de los trabajdores del abastecedor, que solicitó el anonimato, Torres intentó entrar al lugar cortando los barrotes que protegen la ventana.

El dueño se dio cuenta y se levantó con un arma, calibre 38, y, cuando vio a Torres asomándose, le disparó en la frente.

El joven, que estaba de pie sobre una bicicleta, se fue para atrás y pegó su cabeza contra un muro.

Cheng le compró el abastecedor a otro chino, que lo dejó porque estaba hastiado de haber sido asaltado varias veces.

Las esquinas de esos abastecedores son aprovechadas por jóvenes para consumir drogas y cometer actos obscenos.

Vecinos viven encerrados

Lotes Murillo en Villa Bonita de Alajuela cambió hace muchos años. La muerte de un hombre de apellido Torres, de 21 años, ayer en la madrugada, puso en evidencia los problemas de drogas que viven los vecinos de esa comunidad.

Uno de ellos, que no quiso ser identificado, indicó que la esquina donde ocurrieron los hechos fue tomada por un grupo de drogadictos.

En uno de los huecos existentes en la pared de las pulperías del barrio guardan la droga que consumen, y cometen actos obscenos en plena vía.

"Hace unos días dos alcohólicos se pelearon. Quebraron las botellas y se iban a enfrentar, todo eso al mediodía", comentó el vecino.

Torres, quien se sospecha, iba a meterse a robar en el abastecedor, vive cerca del lugar y es parte de la banda.

"Aquí mucha gente vive encerrada con miedo a que lo asalten o le pase algo peor El lugar antes era muy sano pero poco a poco fue entrando la droga y se apoderó de la seguridad que teníamos", dijo.