 |
Sin esperanza
Jorge Mario Rojas es uno de los productores de arroz afectados. En la foto en una de sus fincas, donde perdió toda la cosecha.
José RIVERA /Al Día
|
Arroceros se hunden
Productores de Los Chiles en crisis Juan Pablo CARRANZA
jpcarranza@aldia.co.cr
Los Chiles. Un grupo de arroceros de Pavón arrastra pérdidas por ¢500 millones y tiene mil hectáreas de arroz arruinadas por una prolongada sequía, de agosto y setiembre del 2004, y la plaga de un ácaro, parásito que se alimenta de las plantas.
La crisis ha llevado a estos arroceros a vender sus bienes para poder seguir cultivando; otros, de forma más drástica, optaron por nunca más volver a sembrar arroz.
Óscar Campos, presidente de la Corporación Nacional Arrocera (CONARROZ), afirmó que la situación es alarmante y consecuencia de una falla del Gobierno por no declarar a tiempo la emergencia agropecuaria en ese sector. Precios golpean
"Estamos haciendo todo lo posible para crear un Fondo Nacional de Estabilización Arrocera. Esto ya fue analizado por la Comisión de Agropecuarios de la Asamblea Legislativa, pero falta su aprobación. Lo correcto era declarar emergencia, desde setiembre, para dar atención a Los Chiles y así reducir el impacto a los productores", aseguró el encargado.
Jorge Mario Rojas, uno de los arroceros afectados, comentó que de las 250 manzanas de terreno que sembró solo "sobrevivieron" 75 este año.
La poca ganancia le alcanzó apenas para pagar intereses. "Le debo a todo el mundo, estoy asfixiado con las cuentas. Tras de eso, los precios en el mercado nos están castigando. El arroz nos lo compran a bajo precio, nos suben el combustible y nos exigen caros procesos en la siembra", dijo.
Además, aseguró que la calidad del arroz bajó por la sequía del 2004 y las lluvias de este mes. El grano presenta 25 por ciento de impureza, cuando lo aceptable en el mercado es 6 por ciento.
Campos informó que CONARROZ, en busca de soluciones para estos productores y reponer la cantidad de grano que se perdió,
decidió importar 127.351 toneladas de arroz este año, lo que generará ganancias a la corporación.
"En febrero entrarán 37.600 toneladas de arroz, principalmente de Estados Unidos, esto generará una ganancia de ¢230 millones. Ese dinero se utilizará para financiar programas de investigación en la calidad del grano y formas de combatir al ácaro", agregó.
"Lo perdí todo"
Edgar Esquivel, de Pavón de Los Chiles, tomó este año una las decisiones más difíciles de su vida: no dedicarse a sus propias siembras.
Luego de 25 años de trabajar en el campo, la crisis que enfrenta por las pérdidas generadas en la cosecha de arroz del 2004, no le dejó más remedio que convertirse en peón para tener un salario fijo y pagar poco a poco la deuda que tiene con distintas empresas.
En su casa son cinco y en la Navidad pasada, según cuenta Esquivel, no pudieron oler ropa nueva, ni llevar a pasear a sus hijos.
"Perdí todo lo que sembré el año pasado, no pude hacer nada. Nunca había sucedido esto, en años anteriores hay bajas en las cosechas, pero en el 2004 fue de pérdidas totales. La sequía y el ácaro nos hundieron", comentó el agricultor.
Para salir un poco de sus "congojas" económicas, Esquivel vendió gran parte de su ganado y piensa qué más puede vender.
"Mis cuentas crecen, los intereses se acumulan. No vemos ayuda de ninguna institución. Acá la gente viene a hacer inspecciones, nos dicen que las pérdidas son grandes, pero nos dan pocas soluciones y actúan muy lento", afirmó.
|
