Domingo 08 de mayo, 2005. San José, Costa Rica.



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Foto Principal: 967416
preso
El sospechoso del homicidio está preso a la orden de las autoridades judiciales de Corredores.
Archivo/Al Día

Brutal crimen de mujer en Corredores

En Corredores, Puntarenas

Sylvia CHAVES
Alfonso QUESADA, corresponsal.

Colaboró Rodolfo MARTÍN

Corredores, Puntarenas.-Víctima de los celos de un exnovio, Meilyn Anchía Artavia, de 19 años, fue asesinada antenoche de no menos de 16 puñaladas.

El suceso ocurrió en Central Campesina de Corredores de Puntarenas, cuando la joven compartía en un bar con unos amigos.

A esta fatalidad se unió el hecho de que la víctima no recibió ayuda de la Cruz Roja, ya que por falta de presupuesto las unidades no se trasladaron al sitio del suceso. (Ver recuadro aparte)

Además:

  • Cruz Roja no llegó
  • Mal de nunca acabar
  • La historia de este crimen empezó a escribirse dos años atrás, cuando la joven decidió vivir junto a su novio, de apellido Araica, quien pasado los meses empezó a agredirla física y emocionalmente.

    Hace seis meses, Anchía huyó del hogar y presentó una demanda contra su compañero, de 23 años. Como resultado, las autoridades le prohibieron acercarse a la mujer, indican versiones oficiales.

    "El sospechoso seguía buscándola, y la amenazó de muerte. Incluso le decía que si la encontraba con otro hombre le iría muy mal", informó el comisionado de la Fuerza Pública, Luis Ortega.

    Fatal noche

    Aunque su madre le suplicó que no saliera de casa para evitar un encuentro con su expareja, Meylin decidió asistir a la inauguración de un bar en la zona. Antes de marcharse, tranquilizó a su madre diciéndole que no se preocupara, que solo estaría un ratito fuera de la vivienda.

    Al llegar al sitio, Meylin se encontró con cinco amigos. Uno de ellos, Orlando Rojas, era quien se encargaba de protegerla.

    "Ella llegó a las cinco de la tarde, se sentó con nosotros, estuvo muy tranquila. Al rato, llegó el exnovio de ella, pero ni le habló ni vino a buscarla. Cuando nos dimos cuenta que estaba ahí, quisimos protegerla y Orlando dijo que él la cuidaría", comentó Héctor Morales, amigo de la víctima.

    Según comentan testigos del hecho, el agresor estaba dispuesto a todo e incluso dijo a uno de los presentes en el bar, que mejor se fuera del lugar, porque ahí iba a pasar algo terrible. El hombre tomó el comentario en broma y se marchó.

    "Ella se puso de pie para ir al baño y con ella caminó Orlando. Pero Meylin salió primero del baño y se regresó sola a la mesa. En ese momento el hombre la encontró en el centro del bar y la sujetó del cabello", narró Morales.

    "Así quería encontrarte" fueron las últimas palabras que, según testigos, escuchó Anchía al tiempo que su expareja empezó a apuñalarla en el cuello, pecho, abdomen y brazos. Anchía cayó al suelo, mientras que quienes estaban presentes vapulearon al sospechoso.

    Aún así, el hombre logró huir del lugar para esconderse en la vivienda de su padre, a unos 700 metros del sitio del suceso. En la casa fue detenido por la policía judicial, horas después del crimen.

    Meylin era la mayor de tres hermanos y cursaba el bachillerato en el Liceo Nocturno de Ciudad Neilly, lugar hasta el que llegaba después de 40 minutos de viaje.

    Cruz Roja no llegó

    Corredores, Puntarenas.- En medio de la impotencia, los vecinos de Central Campesina, en Corredores, esperaban que la Cruz Roja auxiliara a Meilyn Anchía Artavia, de 19 años, apuñalada por su exnovio.

    Sin embargo, la ayuda nunca llegó y la joven murió.

    Los comités de Laurel y Ciudad Neilly, cercanos al lugar del crimen, no enviaron personal a la zona al no contar con el recurso humano ni material disponible, confirmó Orlando Esquivel, Gerente General de la Cruz Roja, que paradójicamente hoy celebra su Día Mundial.

    "Los comités de la zona sur y de Limón atraviesan una situación económica crítica que obligó al Consejo Nacional a reducir el recurso humano, por lo que al haber poco personal en ocasiones el comité queda solo", aseveró Esquivel.

    Según Esquivel, la institución investigará lo sucedido, pero advirtió que en cualquier momento podría suceder algo igual en cualquier parte del país.

    "La Cruz Roja no tiene dinero para contratar personal, lo único que pedimos es conciencia en las personas para que ingresen al plan de voluntariado y así lograr atender todas las emergencias", puntualizó el funcionario.

    Mal de nunca acabar

    Meilyn Anchía Artavia, de 19 años, se convirtió en la novena víctima de la violencia doméstica en lo que va del 2005.

    La joven fue asesinada por un exnovio enfermo de celos y pasó así a engrosar una lista de un mal que pareciera nunca terminar.

    Como si se tratara de una historia escrita al carbón en este caso, como en la gran mayoría, la mujer contaba con protección especial, un beneficio que de nada le sirvió.

    Solo durante el 2003 y 2004, las autoridades reportaron 50 víctimas de violencia intrafamiliar, en lo que es una de las estadísticas más elevada de la última década.

    Junto a Meilyn, la lista de víctimas de este año, entre otras, la conforman Ana Lim Ruiz López, de 37 años, Claudia Barrantes, de 31, y Vidalys Rodríguez, de 28,

    Uno de los casos más trágicos sucedió a inicios de año en Paquera, donde un hombre terminó con la vida de su pareja sentimental, de su exmujer y de tres vecinos, para luego quitarse la vida.

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