Salud

Baje la pancita cervecera

De la misma forma como la levadura hace crecer el pan, la cerveza provoca el aumento del abdomen, o sea, la pancita.

Es inevitable: entre más "rubias" se tome usted, más barriga le saldrá.

Por eso, la primera medida que recetan los expertos es beber menos. "Si el tamaño del estómago es un problema, ningún ejercicio funcionará si se toma igual", explica el fisioterapeuta y entrenador personal, César Sánchez.

El experto asegura que dos o tres cervezas cada tres días debería ser el límite para quienes quieren estar en línea.

Es necesario practicar dos tipos de ejercicio: de piernas y hombros. En conjunto, esas dos le fortalecerán el abdomen.

Para las piernas, debe acostarse sobre la espalda, extenderlas y sostenerlas en el aire 20 segundos y descansar cinco segundos. Esta rutina debe hacerla 10 veces.

Luego, descanse 90 segundos y vuelva a elevar las piernas, las estira y las dobla 18 veces, y descansa. Haga unas seis rutinas de estas al día o cada dos días.

En el caso de los hombros, es necesario contar con un peso: lo ideal sería comprar unas mancuernas, pero una bolsa de arroz o una botella llena de arena cumplirán bien la función.

Inclínese a los lados, sosteniendo el peso, 10 veces a cada lado. Respire muy profundo y despacio, mientras sostiene los pesos al frente, con los brazos estirados. Por último, levante los pesos sobre su cabeza manteniendo el cuerpo firme, 10 veces.

Para completar y asegurarse un excelente resultado, Sánchez recomienda caminar o correr en la mañana, nadar o practicar la bicicleta estacionaria.

Recuerde: no debe beber antes de acostarse.