Ana Istarú, actriz
A patadas con Lorena
En su nuevo,y primer, personaje de televisión asume el reto de representar una tica "normal" Jorge Andrés Quesada
Nació como Ana Soto Marín; luego se dio conocer en el mundo de las letras y las tablas como Ana Istarú y, desde hace poco más de tres meses, es la popular Lorena Hernández en el programa "Eso que llaman hogar", de canal 7.
Precisamente es gracias al papel de "Lorena" que Ana Istarú lleva su trabajo hasta el hogar de miles de costarricenses quienes -según la artista- pueden encontrar en el espacio el reflejo de muchas realidades nacionales que no deberían pasar inadvertidas.
¿Qué tienen en común Lorena y usted?
Que tratamos de crear un equilibrio para poder sobrellevar situaciones que demandan mucho como el trabajo y la familia.
¿Y qué no le gusta de ella?
Tenemos formas de pensar diferente. Por ejemplo ella perdonaría la infidelidad, ¡yo no! "Por eso es que a veces me doy de patadas con el personaje".
Entonces: ¿cómo hace para encarnarla?
Intento comprenderla como mujer y ser humano.
Pero, ¿le admira algo?
¡Claro! Ella es una mujer que está llena de energía, valor y honestidad. Cree que lo que hace por su familia siempre es lo correcto.
¿Por qué a Lorena todo le sale mal?
No lo sé, habría que esperar más para tal vez encontrar la respuesta. Es curioso: Aplica todo lo que le enseñaron en el hogar, la escuela y la iglesia y, a pesar de esto, la vida le ha puesto mala nota.
¿Le pasa eso a la mujer costarricense?
Sinceramente no lo sé, pero me gusta pensar que las personas hacen las cosas con muy buenas intenciones.
Siendo usted una actriz de profesión, ¿por qué se tardó tanto para trabajar en la televisión nacional?
Porque ahora siento que, a través de mi trabajo, puedo hacer un aporte social. Además, esta es la primera vez en el país que alguien muestra un programa con drama psicológico.
En esta etapa televisiva: ¿cuál ha sido su mayor reto?
He tenido que adaptar mi forma de actuar. Me falta mejorar algunos aspectos técnicos porque, no es lo mismo hacerlo en un escenario con la compañía del público, que hacerlo frente a una cámara; esta es muy fría.
¿Cuál es el valor agregado del programa?
Que presenta realidades que se viven en miles de hogares aquí: falta de comunicación, problemas de adicción, divorcios y otros. Aquí no hay héroes ni villanos. Se presentan historias que pueden estar viviendo muchas personas.
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Cuando no es "Lore"
Vive en Zapote y, sin ninguna pena, dice su edad: 45.
El seudónimo se lo puso su padre cuando ella tenía 8 años y confiesa que escribir es su gran pasión.
Nunca le ha gustado el ejercicio, sin embargo, ahora camina y levanta pesas por razones de salud.
Tiene 3 hijas: Valentina (17 años), Avril (de 13) y Ardelia (6). No escucha radio y tampoco ve televisión.
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