Dos locos años

Franklin Vargas y Rolando Carmona pueden "rajar" de que trabajan en lo que les gusta, pasan en una pura risa y hasta les pagan por eso

Se la han pasado todo octubre en una pura celebración, pues su programa "De Locos" los tiene muy contentos por los dos años cumplidos.

Y no es para menos, Rolando Carmona y Franklin Vargas se la pasan muertos de la risa, poniéndole humor a las noches de los viernes, por canal 7.

A las 8 p.m., con los pies en alto, el trabajo engavetado y la sonrisa de fin de semana, los ticos pueden verlos vestidos de cómicos personajes con sus invitados.

Lejos de los chistes, el maquillaje, las pelucas y los vestidos talla grande, ellos hablan con Al Día y aseguran que, a veces, hacer reír es una cosa seria.

"Yo sé lo que es estar saliendo de un divorcio, llorar todo el día, limpiarme las lágrimas en la puerta y hacer una presentación ante muchas personas como si nada hubiera pasado. No es fácil", comenta Carmona.

Vargas asegura que gracias a ese don que Dios le dio, él y su familia han podido surgir más en la vida. "No es que tenga caprichos caros, pero he podido comprarme cosas que antes ni imaginaba".

Entre conocidos Con Wendita: Wendy Cruz deja la seriedad de las noticias para contar chistes con ellos y pasarla bien. Puro karaoke A la modelo Andrea Bermúdez la invitaron al karaoke con Totoño y Maletín. La bellas y los árabes No podía faltar la guapa Kathryn Arbenz en "De Locos". Ella salió con un biquini mortal. En el espacio Hasta Franklin Chang fue parte del espacio, cuando se lo encontraron en el hotel Marriott.

El conquistador es esclavo de lo conquistado

Franklin Vargas nos cuenta su gusto por los carros de lujo y cómo es su vida ahora que es una persona tan conocida.

¿Qué guarda de estos dos años en "De Locos"?

El apoyo y cariño de la gente. Dios me ha bendecido con este talento.

¿Le molesta que la gente lo busque para hablarle en la calle?

No me molesta, es bueno, hay que sentir ese cariño. Le preguntan a uno por los personajes.

¿Dónde le molestaría que lo saluden?

Diay, cuando estoy entre cuatro paredes y con música suave de fondo.

¿Qué beneficios económicos le trajo ser humorista?

Es una profesión muy bien pagada. No somos millonarios porque no me levantaría tan temprano todo el tiempo.

¿Tiene el mejor trabajo?

A nosotros nos pagan por hacer lo que nos gusta. A veces tenemos que esconder los problemas y hacer reír.

¿Cuál es el regalo más grande que se ha comprado?

Un carro que compré, pues hay muy pocos en Costa Rica. Es un Chrysler PT Cruiser. Fue un capricho, porque es un excelente vehículo.

¿Ese es su pasatiempo?

No, no, con lo que Dios me ha dado estoy contento. Dios me ha bendecido.

¿Dónde gana más en la tele o en la radio?

Igual, gano igual.

¿Cómo ha cambiado desde que salió en la "Dulce Vida"?

No he cambiado nada, aunque a veces el conquistador se hace esclavo de lo conquistado.

"El humor me permitió salir de la pobreza"

Rolando Carmona empezó en el teatro hace 17 años; sin embargo, hoy que está en la tele extraña las tablas. Él dice que el humor le permitió salir de la pobreza.

¿Qué beneficios le ha traído ser gracioso?

En mi familia, entre las cosas más importantes está el placer de que la gente lo quiera a uno tanto. También hay un beneficio económico por lo que uno le pone cariño al asunto. Con este trabajo comen todos en la casa.

¿Cuál es el gusto más caro que se ha dado?

En mi familia fuimos bastante pobres, digo fuimos porque ahora hemos surgido. Tenemos casa y carro propios; antes todo eso se añoraba.

¿Carros de lujo?

Tenemos carros muy bonitos, entre estos un Mitsubishi Montero. Siempre me han gustado los motores, tengo un carro deportivo, un Toyota Spider MR2 (le dicen el carro capricho), solo hay cinco en Costa Rica. Siento que fue un regalo, más que un capricho; un regalo al esfuerzo y al trabajo.

¿Es usted muy romántico con su novia?

Sí, bueno, ya no es mi novia, porque vive conmigo desde hace tres años, se llama Rosibel Cambronero.

¿Usted está loco?

Para usar en tele un vestido blanco, hay que estar más loco que una cabra.