San José Costa Rica. Edición del 25/septiembre/2005. | Ir a Al Día |
Nada de poses Jorge Andrés QuesadaElla sabe que los retos llegan en cualquier momento. Por eso camina con la vista en alto: no quiere dejar pasar uno solo. Desde que entró al mundo de la televisión nacional, esta belleza se ha dedicado a trabajar con el único fin de superarse. Primero fue canal 2, luego el 38 y así siguió hasta llegar a Teletica, donde dice sentirse muy cómoda.
"Mi carrera en televisión ha sido muy provechosa y pienso que estoy en un momento donde puedo ofrecer muchas cosas positivas". Es por esto que Marilín Gamboa, figura infaltable de la farándula nacional, no pierde el impulso con el cual inició en la pantalla chica a los 18 años. Al contrario, sigue con deseos de crecer más. "Trato de hacer que la gente se sienta cómoda. No me gustan las poses. Me gusta presentarme como soy". Ese afán podría llevarla, en un futuro cercano, a explorar terreno en la tele internacional. Está negociando una propuesta del canal 2 de Panamá. ¿Para qué? "Quieren que trabaje para un programa que se llama 'La Cáscara'. Es un espacio con secciones de farándula, 'sketches' y sátiras de personajes de la política; es muy irreverente".
En caso de aceptar se encargaría de actuar en algunos episodios, pero, principalmente, cubriría los eventos más importantes que ocurran en el medio farandulero tico. "Significaría un paso muy importante porque el programa se ve también en Miami y en Puerto Rico". Recientemente dejó su puesto como directora de Mercadeo de los hoteles Meliá Cariari y Tryp Corobicí porque pudo más el llamado familiar. "Soy la mayor y mi hermano Juan Pablo me pidió su apoyo, algo que nunca le negaré". Es que, si no lo sabía, los Gamboa tienen una empresa que da el servicio de fumigación de plantaciones en varias partes de Guanacaste. De su experiencia en los hoteles comenta: "fue una escuela muy provechosa donde aprendí mucho. Estoy muy agradecida con quienes me ayudaron a tener un buen paso allí durante año y medio". Ahora ve hacia adelante y cuenta que está "cocinando un nuevo proyecto laboral" además de lo de Panamá. ¿Cuál? "Mejor se lo cuento cuando esté en pie; si no se me sala", dice. Al borde de los 30, cuando muchas mujeres están casadas, con hijos o, por lo menos mantienen una relación estable, Marilín está "despreocupada por el matrimonio". "Creo que formo parte de un grupo de mujeres muy grande en Costa Rica. Somos profesionales, empunchadas y queremos devolverle algo a nuestros seres queridos". Según piensa, esta actitud independiente molesta a muchas personas. "Por eso vienen las críticas sin sentido. Todo es bueno para hacer un rumor, señalar y juzgar...". La semana anterior, una publicación la puso en el blanco de las críticas a las que ella responde "hace mucho me dejó de importar el qué dirán". Después de haber vivido diversas experiencias como figura pública siente más deseos de demostrar que es parte de una generación de ticas deseosas de hacer las cosas "muy bien". Por eso el tiempo de ponerle atención a los cuestionamientos pasó. Ahora sigue hacia adelante. ¿Cuándo toma impulso? "Nunca; no me sirve, sigo, adelante, adelante".
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