San José Costa Rica. Edición del 13/agosto/2006. Ir a Al Día
 

Paul McCartney y Heather Mills, artistas

La guerra sigue

Paul McCartney cambió las cerraduras de su casa en Londres para que su exesposa no pudiera entrar y hasta la policía intervino

Londres/DPA.- El enfrentamiento está que arde entre Paul McCartney y su segunda esposa, Heather Mills, como resultado de la solicitud de divorcio que presentó el músico meses atrás.

Los vigilantes de la finca del exBeatle llamaron a la policía cuando Mills se presentó, al parecer, sin avisar, junto a su pequeña hija delante de la casa de McCartney en el distinguido barrio londinense de St. John's Wood, y quiso entrar.

Según informaron el martes el "Daily Mirror" y otros diarios sensacionalistas, Mills, de 38 años, quería entregar a la pequeña Beatrice de dos años en casa de su padre. Pero no pudo abrir la puerta de la residencia porque el artista había cambiado la cerradura.

Cuando tocó el timbre y no le abrió nadie, el guardaespaldas de Mills se subió a un muro para abrir la puerta por dentro. Entonces, el equipo de seguridad de McCartney alertó a la policía.

Bajo la mirada de numerosos fotógrafos, la todavía esposa del ex Beatle esperó la llegada de los agentes. La pequeña Beatrice fue llevada al otro lado de la casa para que no viera las tensas escenas.

Según el "Mirror", Paul no estaba en la casa en ese momento y Heather logró finalmente entrar a ella tras varias llamadas telefónicas.

La pareja aún debe resolver dos importantes puntos de su divorcio: el económico y la custodia de su hija.

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De los buenos momentos de la pareja solo queda su hija. Ahora solo hablan lo necesario.
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