Dos hombres dan golpe a BCR en Plaza Cristal

Se llevaron ¢33 millones

Amenazaron de muerte a tesorero para que abriera bóveda pequeña

Curridabat - Dos asaltantes aprovecharon ayer el ingreso de un empleado de la agencia del Banco de Costa Rica (BCR), en el centro comercial Plaza Cristal, en Curridabat, para entrar y sustraer más de ¢33 millones que mantenían en pequeña bóveda.

El atraco ocurrió a las 10:10 de la mañana, luego de que dos hombres, en apariencia colombianos, uno de ellos vestido de saco y corbata redujeron a la impotencia a un oficial de seguridad privada que permanecía en la entrada principal.

Dentro de la sucursal y con el guarda inmovilizado, los hombres exigieron armados con dos revólveres calibre 38 que se presentara Roberto Rivera, encargado de operaciones, y un tesorero, pues sólo ellos cuentan con las llaves de la tesorería, donde se ubica una pequeña bóveda.

Con las armas amenazan a los seis empleados de esa sucursal.

Manos llenas

Tras esperar unos cinco minutos a que abriera la bóveda, los ladrones lograron sustraer ¢25,4 millones en moneda nacional, y $15.306 (equivalentes a ¢7,9 millones) para un total de ¢33 millones, informó ayer Miguel Arguedas, director de procesos y logística del Banco de Costa Rica.

De acuerdo a los personeros de la entidad, los falsos trabajadores portaban una especie de gafete que simulaba ser del banco.

Mientras esperaban a que abriera la bóveda, un asaltante vigilaba armado a otros cuatro empleados en el área de plataformas, mientras que su cómplice encañonaba a los otros funcionarios.

Con base al video de seguridad del banco, los ladrones permanecieron dentro de las instalaciones unos 7 minutos.

Luego de que sacaron el dinero los dos hombres salieron caminando de la sucursal, sin despertar mayores sospechas y se subieron a un vehículo Hyundai Elantra color vino, que habían dejado en una calle aledaña.

Gracias al testimonio de varios testigos, la Fuerza Pública y el OIJ lograron dar con el Hyundai, que apareció en la casa de unos de los sospechosos en calle Marcial en San Rafael Abajo de Desamparados, donde a las 3:30 de la tarde y tras la autorización de un juez penal se procedió a allanar. El OIJ incautó el carro para tomar huellas y algunos rastros.