Había sido sentenciado a 4 años de cárcel

Farid de pachanga

El exministro Ayales cumplirá condena el viernes

Feliz se veía Farid Ayales en el Club Unión, el viernes de la semana pasada, durante un agasajo que se le ofreció al presidente Óscar Arias.

"Don Óscar y yo somos buenos amigos, y fue una bonita oportunidad para saludarlo", comentó.

El próximo 7 de julio, Ayales, ministro de Trabajo en el gobierno de José María Figueres, cumplirá con la pena de cuatro años de prisión que le fue impuesta por el delito de concusión (cuando un funcionario público obliga a alguien a entregarle una dádiva).

Desde junio del año pasado, Ayales disfruta de libertad condicional y, finalmente, dejará de dormir una noche a la semana en el centro semiinstitucional San José, en Goicoechea.

Asimismo, podrá salir del país para tratarse la leucemia que padece desde hace 10 años.

"La cárcel es una porquería que no cambia a nadie, y una cruel escuela de delincuencia", afirmó.

Ayales, de 58 años, ejerce actualmente como abogado en un bufete, junto a su colega Virgilio Calvo.

Además, atiende sus empresas en Guanacaste y es dueño del restaurante Baalbeck, en Heredia.

"Yo no me arrepiento de nada y tampoco me siento culpable. Fue ridículo que me condenaran por ayudar a los nicaragüenses.

"Querían sacarme de la escena política. Fue injusto, pero lo lograron, pues estoy asqueado de la política y no quiero regresar", señaló Ayales.

Tras preguntarle si alguna vez lo insultaron en la calle por su condena, respondió: "Nunca, la gente siempre fue muy solidaria. Sólo una vez, un tipo me dijo: '¿No es que usted estaba enfermo?'".

"¿Qué quería, que estuviera muerto?", se preguntó el Exministro de Trabajo.