Por Isaac Lobo

Difícil de conquistar

Andrea Salas asegura que no es cualquier hombre el que llega a hacerle cosquillitas en el cuerpo

Aunque muchos no lo crean, el mayor tesoro de Andrea Salas no son esos ojazos verdes. Lo es su hija Daniela, de 4 años.

Andrea es una de las modelos del "Estadio Mundialista" y a quien ser madre joven la ha vuelto muy segura de sí misma. Aquí contesta preguntas de algunos lectores sobre el amor, la conquista, la carrera.

¿Qué parte del cuerpo le enciende la pasión?

Soy muy cosquilluda; sobre todo en el cuello y las piernas. Claro, para que un hombre me toque ahí, le habrá costado bastante tiempo.

¿Es difícil conquistarla?

Totalmente. Dicen que lo que cuesta es mejor, ¿no?

¿Cómo debe terminar una noche romántica?

(Risas) Con ganas de conocer más a la otra persona.

¿En la cama?

Diay, depende; la primera vez, jamás.

¿Cómo es en la cama?

Complaciente, pero, sobre todo, muy apasionada.

¿Cuál satisfacción obtiene por desfilar en hilo?

Ninguna. Una lo hace porque es un trabajo y pagan bien. Para mí no es muy agradable, lo hago de manera profesional.

¿Hay que ponerse siliconas para ser una modelo popular?

No, lo que importa es lo que la muchacha proyecte y que sea ella misma. Si se pone es para sentirse bien.

¿Cree que hay gente que la envidia cuando la ve conduciendo un BMW del año?

Sí, claro...

Entonces ¿se gana bien como modelo?

También mi mamá me ayuda mucho, he ganado bastante y soy muy ahorrativa y me doy mis lujos.

¿Cómo quiere que la vea su hija?

Como una mujer exitosa.

¿Fue difícil ser madre soltera tan joven?

Mucho, porque tenía 17 años. Tuve que perderme de mucha cosas por ser madre, pero no me arrepiento de nada. La amo (a Daniela).

Agradecemos a:

Luis Augusto Sánchez, Mariela Bonilla, Ricardo Ocampo, José Miguel Angulo y a todos los que enviaron preguntas para Adriana.