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Puerto Escondido de Pital, San Carlos Iba por hojas y lo machetean Ramón Picado, de 51 años, tenía tres heridas en la cabeza Erick Carvajal M.Edgar Chinchilla ecarvajal@aldia.co.cr Corresponsal@aldia.co.cr San Carlos. - Mauricio Vellorín lo vio tirado en el suelo y pensó que estaba dormido y borracho, sin embargo, Ramón Picado, de 51 años, estaba muerto. Tres machetazos en la cabeza acabaron con su vida, ayer en la madrugada, en Puerto Escondido de Pital. Vellorín lo vio ayer a las 4:55 de la mañana, porque salió en un automóvil, a dejar a una familia en Pital. De regreso a su casa se detuvo y pudo ver la sangre en la cabeza de Picado y avisó a la policía. Al parecer, la víctima iba por unas hojas para hacer tamales. La policía sospecha que fue asesinado con el machete que llevaba, pues no apareció en la escena. Al lado izquierdo del cuerpo quedó la funda vacía. El cuerpo estaba boca arriba, 150 metros al este del cementerio de Puerto Escondido, a la orilla derecha de una calle de piedra que comunica a esa comunidad con Cuatro Esquinas de Pital. No hay sospechosos Hasta el momento la policía no tiene a ninguna persona como sospechosa del asesinato. La fiscal Gabriela Alfaro comentó que Picado presentaba tres heridas de machete, entre la coronilla y la nuca, con exposición de masa encefálica. El cuerpo fue levantado a las 8:33 a.m., por orden de la jueza Károl Delgado. Miguel Azofeifa, un vecino que conocía a Picado, comentó que la víctima llegó a pedirle prestado ¢1 mil y, como garantía, le dejo la billetera con todo y documentos. "Eso fue el viernes en la noche, ayer (sábado para los lectores) vino a pedirme más dinero, pero le dije que no. Me di cuenta que había muerto y vine a dejar los documentos", comentó Azofeifa. Un taxista, de apellido Cartín, afirmó ayer que lo vio a la medianoche en la parada de taxis. "Me dijo que no se iba para Puerto Escondido porque allí había gente muy mala, como que tenía miedo de ir", dijo el taxista. Sergio Quesada es el dueño del machete que tenía Picado. "Lo tenía hace varios días porque me estaba haciendo unos trabajillos. Hoy (ayer) a las 6 de la mañana tenía que ir a cortar las hojas para los tamales". Incluso, Quesada le había pedido el machete, pero Picado le dijo que iba a hacerle filo para poder cortar las hojas.
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