¡Explosivo!

En un estadio casi lleno, Daddy Yankee dio un conciertazo anoche en el estadio Ricardo Saprissa

Daddy Yankee hizo anoche lo que los grande artistas: seducir a su público y hacerlos gritar.

El artista comenzó a las 9:20 con "King Daddy", que puso eufóricos a sus fans.

Los problemitas de voz los compensó con un escenario y efectos especiales increíbles: del piso salieron llamas y los fuegos artificiales parecían que iban a caer en las cabezas del público, pero nunca lo hicieron.

El boricua le hizo honor a esta canción, salió sentado en un trono acompañado de 10 bailarines, cinco mujeres y cinco hombres. Ellas con camuflaje y ellos como pequeños "daddy yankees".

El cantante salió con todo su "blin blin": con cadenas de oro que le llegaban casi hasta el ombligo; una, la más llamativa, con diamantes.

No faltaron los aretes y sus eternos anteojos; la camiseta de la "Sele" la dejó para más tarde. La gente estalló cuando él cantó "La Gasolina", su mayor éxito en Costa Rica y el resto del mundo.

Hay que destacar la gran presentación de los nacionales, como Tapón y Lilli O'Bang. El primero hizo un recorrido por su carrera y al final puso a todos a brincar y a sentir la pasión con el tema de la Selección Nacional, "Hasta la muerte".

Lilli, por su parte, sorprendió a todos con su gran calidad vocal.

En el escenario no faltaron las pantallas gigantes por las que pasaban imágenes para acompañar cada tema.

El lunar de la noche fue que las publicitadas áreas "platinum" y VIP no tenían sillas; la gente estaba como si hubieran comprado entradas preferencial. La energía que pudieron gastar bailando la usaron para aguantar las cinco horas del evento.