Jorge Muñoz Somarribas comunicador

“Esto me duele y voy a extrañar las fiestas”

El autor del recurso de amparo que enterró los festejos de fin de año no teme a las críticas

Si de algo no tiene la culpa Jorge Muñoz Somarribas es de que no haya festejos populares este año. Los verdaderos culpables son otros.

Pero este hombre de contextura frágil, de 40 años, vecino de Cipreses de Curridabat, soltero y sin hijos, carga con la autoría de un recurso de amparo que evidenció la debacle en Zapote, y por eso la Sala IV le dio la razón.

Muñoz, quien trabaja en radio Costa Rica, no teme que lo acusen de amargado. De hecho, se autocalifica como una persona “básicamente feliz y muy sensible”.

¿Cómo se sintió cuando supo que la Sala IV le dio la razón y ordenó suspender las fiestas?

Me deja un sabor agridulce, porque no vamos a tener los festejos tradicionales. El premio no es para mí, porque los vecinos de Zapote habían presentado once recursos en los últimos años. Yo los estudié para poder redactar el mío.

¿Por qué un vecino de Cipreses de Curridabat se involucró con lo que sucede en Zapote?

Porque soy testigo de lo que se da en mi cantón y el campo ferial linda con Curridabat. Lo hice al ver la indecencia en las puertas de las casas, después de una noche de fiesta, y que la gente se podía ir a descansar a las seis de la mañana, cuando ya no había bulla.

¿A usted le gustan las fiestas de Zapote?

Claro, en los últimos 10 años no fallé. Iba por lo menos tres o cuatro veces por año, pero se perdieron muchas cosas buenas. Este año no íbamos a disfrutar de juegos de pólvora ni del concurso Tica Linda. Es una actividad que venía en detrimento, y creo que tarde o temprano tenía que darse esto.

¿No le da miedo que la gente le diga aguafiestas?

Habrá quien me califique de aguafiestas, pero la verdad es que la integridad humana está por encima de cualquier actividad.

¿Ha interpuesto otros recursos anteriormente?

Esta es la primera vez. Hacía falta contundencia; creí que lo adecuado era darle un sentido humano a la petitoria que envié a la Sala IV y ampararme a la ley misma.

¿Qué podría hacer la gente durante los días de Navidad?

Para mí, sería un motivo de suma satisfacción que en los centros de población se organicen pequeños turnos, para que la familia costarricense esté unida y se le dé el valor real a las fiestas de fin de año.

¿Quién es el culpable de que no haya festejos populares?

La desorganización y la inexperiencia de los que intervienen en la actividad.

¿Le interesaría trabajar en la organización de los festejos?

Sí, me interesaría mucho colaborar, porque si yo hice algo, ahora tengo que aportar soluciones. Por eso le digo que no lo siento como un triunfo personal.